El edil departamental, Gabriel Gabbiani, expresó su complacencia con la decisión de aceptar la renuncia del director de Tránsito, aunque remarcó que el desorden en la dirección aún continúa. Gabbiani había advertido desde antes del inicio de la actual administración sobre la falta de una política de tránsito adecuada y la necesidad de remover al jerarca.
Gabbiani señaló que desde 2018 o 2019, el tránsito en todas las localidades del departamento estaba en una situación caótica, con numerosas quejas sobre desorden en la circulación y señalización inadecuada. Afirmó que había solicitado la remoción del director en varias ocasiones debido a la falta de respuestas a los reclamos durante las sesiones a las que había asistido el director.
Con respecto a la denuncia del inspector Espino, Gabbiani destacó la valentía del inspector al mencionar problemas adicionales como destrato, acoso laboral, arbitrariedades y presuntos actos de corrupción, lo que provocó problemas personales a Espino. Entre las prácticas denunciadas, mencionó espirometrías mal anuladas, actas adulteradas, devoluciones irregulares de vehículos, y otras malas prácticas en la dirección.
Gabbiani también indicó que, de los seis funcionarios cuya destitución había sido solicitada por el intendente a la Junta Departamental, tres eran de la Dirección de Tránsito. Aunque nadie había objetado la integridad personal de Pereira, Gabbiani afirmó que la responsabilidad del desorden recaía en él, ya que los funcionarios eran los mismos de hace años. Su alejamiento se logró tras conseguir el apoyo de las demás bancadas.
Finalmente, sobre el posible cambio en la Dirección de Tránsito, Gabbiani mencionó que el ingeniero Lucas Facello, conocido de su tiempo como director Nacional de Transporte, tiene las credenciales suficientes para realizar una buena gestión. Aunque no está confirmado que Facello permanecerá en el cargo, Gabbiani expresó su esperanza de que, si lo hace, sea el tiempo suficiente para ordenar la situación.