Por Javier Volonté
La memoria literaria es un género en si mismo, de ahí se desprende el concepto de biografía, ella es muy interesante y en estos momentos goza de gran popularidad, hay acontecimientos muy importantes que forman parte de nuestra identidad nacional que no debemos castigar con el olvido.
En este 2024 se cumplen 50 años de la importante traducción de Hamlet, la gran obra del maravilloso Shakespeare, por parte de Idea Vilariño, ella misma siempre afirmaba (incluso me lo dijo en una oportunidad): soy la esclava de Shakespeare. Sus traducciones siempre fueron de gran calidad, fue Editorial NORMA quien convocó a los grandes traductores de todo el continente americano (43 en total) siendo el coordinador del ambicioso proyecto el literato Marcelo Cohen. La propia Editorial afirmó que las traducciones que hizo Idea Vilariño eran las mas profesionales, con un gran nivel de fidelidad académica.
En Uruguay se editan casi dos mil libros por año. Eso es mucho para un país con las características de Uruguay (poca población y altos costos). El Día Nacional del Libro lo celebramos cada 26 de mayo desde el año 1940. La fecha conmemora el aniversario de la Biblioteca Nacional, la primer Biblioteca Pública de nuestro País, la cual data de 1816, formidablemente es anterior a la independencia, y aún hoy perdura. Para potenciar la fecha trasladé al Ministerio de Cultura la iniciativa de rotular (dicha fecha) cada año con el nombre de un célebre Escritor diferente. Recordar nuestras pasadas glorias literarias es de Justicia. Dar a conocer y poner en valor el gran aporte literario de Uruguay es muy importante. Con la aparición de las nuevas tecnologías uno tiene la impresión de que el libro queda olvidado, pero el caso de Suecia es muy curioso, el gobierno de ese país nórdico canceló su plan de educación digital y redireccionó los fondos para la distribución de libros de texto: quieren repartir uno por materia para cada estudiante. La medida llega luego de un retroceso en las pruebas PIRLS de comprensión lectora. En resumen, vuelven a darle importancia y centralidad al libro.
Nunca podemos olvidar que la lectura aumenta la creatividad, nos permite bajar el estrés, desarrollar habilidades cognitivas, activa la memoria a corto y largo plazo, te permite expandir tu vocabulario, así como mejorar las habilidades expresivas: escritura, ortografía y síntesis de conceptos, entre muchos más.
La literatura uruguaya siempre tuvo y tienen gran calidad, prueba de ellos es que tuvimos 4 candidatos al Nobel de las letras, Juana de Ibarbourou, Carlos Vaz Ferreira, Juan Zorrilla de San Martín y Emilio Oribe.
Por todo ello espero que la propuesta presentada al Ministerio de Cultura sea aprobada, la misma cuenta con el apoyo de AUDE – Asociación uruguaya de Escritores-, su primer presidenta fue Juana de Ibarbourou, fundada el 28 de abril de 1949, dicho colectivo generosamente se pone a disposición de las autoridades para colaborar en la selección del nombre del Autor a destacar en cada año.