El exdirector de la Guardia Republicana y ex Jefe de la Policía de Colonia, Robert Yroa, enfrenta graves acusaciones por parte del fiscal de Delitos Económicos, Gilberto Rodríguez. Este último ha imputado a Yroa por un delito de tráfico interno de armas, exigiendo que cumpla una condena de 18 meses de prisión efectiva. La investigación que desveló el esquema comenzó en 2016, revelando actividades sospechosas que datan desde 2008, mientras Yroa se desempeñaba en el Ministerio del Interior.
La trama de corrupción se desentrañó a partir de una autorización para importar armamento en la que se compraron ilegítimamente tres rifles de francotirador, en lugar de los dos permitidos, con un costo implicado de 3.470 euros por unidad. El destino final del rifle adicional, nunca documentado oficialmente, resultó ser la posesión personal de Yroa durante varios años. Este hecho fue confirmado por la constancia de un representante regional de la marca del arma, que afirmó que Yroa había adquirido el rifle de manera personal, pagándolo con sus propios fondos y aprovechando un régimen de exoneración de impuestos.
El caso tomó un giro más controvertido cuando se descubrió que Yroa había intercambiado el rifle con un conocido, quien intentó registrar el arma en el Servicio de Material y Armamento del Comando General del Ejército en 2016, alegando la necesidad de usarla en una competencia en Buenos Aires. La irregularidad salió a la luz en este proceso, marcando el inicio de una investigación formal.
A pesar de la gravedad de los cargos, inicialmente se impusieron a Yroa medidas cautelares menores, como la restricción de su domicilio y la prohibición de salir del país. Sin embargo, el fiscal Rodríguez ha solicitado recientemente que se le imponga una sentencia de prisión efectiva. La fecha para el control de la acusación y el juicio aún no ha sido establecida, manteniendo en vilo la resolución final de este caso de corrupción notable en Uruguay.
(Fuente: El País)