Mercedes, Uruguay (3 de agosto de 2024) – El Obispado de Mercedes ha emitido un comunicado oficial en respuesta a una denuncia presentada contra el Párroco Ignacio Muñoz de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen en Carmelo. La acusación, que señala presuntas actitudes inadecuadas ocurridas hace 20 años durante una actividad comunitaria, ha desencadenado una serie de procedimientos tanto eclesiásticos como judiciales.
El 26 de julio, un denunciante presentó simultáneamente la acusación ante la Fiscalía de Carmelo y el Obispado de Mercedes. Según el comunicado, el Párroco Muñoz colaboró con la investigación inicial proporcionando una declaración voluntaria en sede policial.
Ante la gravedad de las acusaciones, la Diócesis de Mercedes activó el protocolo de actuación dispuesto por la Conferencia Episcopal del Uruguay. Este protocolo incluye una fase de indagatorias y una investigación preliminar conforme a la legislación eclesiástica. Durante este proceso, el Obispo diocesano tomó declaración al sacerdote, quien negó rotundamente los hechos denunciados. Adicionalmente, la persona denunciante ha formalizado su denuncia por escrito y se ha comprometido a prestar su declaración canónica en los próximos días.
El comunicado subraya el compromiso de la Diócesis con la transparencia y la búsqueda de la verdad. Se han adoptado medidas cautelares previstas por las normas eclesiásticas, respetando la presunción de inocencia del sacerdote involucrado hasta que se esclarezcan los hechos.
El Obispado ha instado a los fieles de la Diócesis a intensificar sus oraciones para que se alcance la verdad y para que la comunidad de Carmelo encuentre fortaleza en su fe. Asimismo, han indicado que no se proporcionará más información durante el proceso de investigación para no entorpecer las diligencias en curso.
Este caso ha generado un significativo interés en la comunidad local, resaltando una vez más la importancia de los procedimientos adecuados y el respeto a todas las partes involucradas en situaciones de este tipo. La Iglesia reafirma su compromiso con la justicia y el apoyo tanto a la denunciante como al sacerdote, confiando en que la verdad prevalecerá tras una investigación exhaustiva.
