La Fiscalía General de la Nación ha emitido un comunicado para informar sobre las medidas adoptadas en la investigación del triple homicidio ocurrido el 11 de agosto en el barrio Colón (Montevideo). Este suceso ha generado una situación compleja debido a un error en la identificación y entrega de los cuerpos a las familias de las víctimas.
En primer lugar, la Fiscalía informó que, debido al estado en el que fueron encontrados los cuerpos, se solicitó la realización de pericias técnicas para determinar su identidad. Estos procedimientos permitieron identificar los cuerpos, los cuales fueron entregados a sus respectivas familias.
Sin embargo, uno de los aspectos más críticos del comunicado es la revelación de un error en la entrega de uno de los cadáveres. Una de las madres, al recibir el cuerpo asignado, no reconoció a su hijo, lo que la llevó a solicitar una nueva prueba de ADN por razones humanitarias. Esta prueba confirmó que el cuerpo entregado no correspondía al de su hijo, lo que obligó a la Fiscalía a solicitar la exhumación de los otros dos cuerpos para verificar su correcta identificación.
Este incidente ha llevado a la fiscal actuante a informar al fiscal de Corte para que se investigue cómo ocurrió este error en el proceso de identificación y entrega de los cuerpos. La situación destaca la importancia de la precisión en los procedimientos forenses, especialmente en casos tan delicados como los homicidios, donde el manejo adecuado de la información y el respeto por las familias afectadas son fundamentales.
Este caso pone de manifiesto la necesidad de revisar y mejorar los protocolos forenses para evitar situaciones similares en el futuro y garantizar que las víctimas y sus familias reciban el tratamiento adecuado durante todo el proceso judicial.
El comunicado de la Fiscalía revela un problema significativo en el manejo de la identificación de cuerpos en casos de homicidio, subrayando la importancia de la exactitud y el respeto en estos procedimientos. La actuación de la Fiscalía para rectificar el error y la disposición para investigar lo sucedido es un paso necesario para esclarecer los hechos y evitar futuras equivocaciones que puedan agravar el dolor de las familias afectadas.
El vocero de Fiscalía, Javier Benech, aclaró que la Fiscalía no es responsable de la realización de los exámenes de ADN, ni de la entrega de los cuerpos. La responsabilidad de la Fiscalía apunta a la investigación penal de los hechos.