La tranquilidad de la tarde del sábado se vio interrumpida cuando, a las 17:50, la Armada Nacional recibió un llamado de emergencia del velero Lorbas. La embarcación, que navegaba en las cercanías del kilómetro 159 del río Uruguay, a unos 500 metros del Arroyo Farrapo, reportó fallas en el motor y solicitó asistencia urgente debido a la aproximación de una tormenta. A bordo viajaban cinco personas.
La situación era crítica: el velero se encontraba a la deriva y el patrón de la nave solicitó evacuación inmediata. En respuesta, la Prefectura Nacional Naval (PNN) despachó la embarcación PNN 318 desde el destacamento de San Javier. El objetivo era claro: salvaguardar a los tripulantes y evitar un potencial desastre en medio de condiciones climáticas adversas.
Tras una rápida navegación, los efectivos de la Armada llegaron al lugar y procedieron a evacuar a las cinco personas, trasladándolas de manera segura al puerto de San Javier. Según el informe oficial, todos los tripulantes fueron encontrados en buen estado de salud, lo que trajo alivio tanto a los rescatistas como a los propios navegantes.
La operación no culminó allí. Una vez asegurada la integridad de los tripulantes, se llevó a cabo la compleja maniobra de remolque del Lorbas. Finalmente, la embarcación quedó fondeada en el puerto local de San Javier, concluyendo con éxito la misión de rescate.