La Seccional Tercera investiga un caso de estafa denunciado el pasado 17 de enero, en el que un ciudadano fue víctima de un engaño a través de redes sociales. Según el reporte policial, el denunciante contactó a una supuesta automotora que ofrecía vehículos en venta. Tras negociar las condiciones, realizó un giro de 750 dólares como adelanto para asegurar la compra del automóvil.
Días después, el comprador descubrió que todo era un ardid cuidadosamente planeado. La empresa no existía y el perfil utilizado para comunicarse desapareció de las plataformas. La maniobra dejó al denunciante sin respuesta y sin posibilidades aparentes de recuperar el dinero.
Las autoridades locales han iniciado las investigaciones para identificar a los responsables de esta modalidad de fraude, que se apoya en la facilidad de interacción y anonimato que brindan las redes sociales. Se hace un llamado a la población a extremar las precauciones al realizar transacciones en línea y a verificar la legitimidad de las empresas antes de efectuar pagos.
Este caso se suma a una creciente tendencia de estafas digitales que afecta a compradores incautos. La policía recuerda la importancia de denunciar cualquier situación sospechosa para prevenir futuros delitos similares y proteger a la comunidad.