El Grupo Quiero Comprar Mi Casa viene apostando a conformar mesas regionales con representantes de los departamentos que ya están organizados.
También destacan la importancia de las comisiones departamentales como estrategia del grupo que permite ser generadora de ideas y compromiso en la gente, advirtieron.
«Con respecto al Proyecto, muchos de nosotros jamás imaginó la magnitud de esta herramienta, que hoy batalla contra las cúpulas especuladoras de los sistemas inmobiliarios, contra los intereses de quienes mantienen como negocio la vivienda.
Sin duda que el Proyecto va en contra de los propósitos del gran capital, donde muchos corren detrás de los beneficios que estos perciben en el modo de operar los inmuebles.
Hoy se encuentran miles de viviendas abandonadas a lo ancho del país, pasando por alto la nesecidades por causa del negocio que estas generarían si se vendieran a los sectores de clase media alta para arriba, dejándonos excluidos sin la mínima posibilidad de acceder a ellas lo sectores más bajo, refiriéndonos a los que generan ingresos menos de los $ 64.000, equivalente a una canasta básica,» explica un comunicado interno al que accedió Carmelo Portal.
El documento es muy crítico con los actuales planes de vivienda que existen a nivel de gobierno explicando que los mismos incluyendo los » V.I.S (vivienda de interés social) el cual ofrece apartamentos entre 90.000 y 120.000 dólares, anticipo y cuotas hasta $25.000;
sin ser extremistas, si no realistas, podemos mencionar también las cooperativas, donde se pasan años de espera entre sorteos y especulaciones, donde muchas de ellas abortaron dejando sin suerte y hasta sin plata a la gente que invirtió en ellos. Sin olvidar también que muchas de esas construcciones terminan deterioradas antes de culminar su pago que triplican el valor del costo real.»
Los integrantes de Quiero Comprar mi Casa «pagan 25 años la vivienda, lo que implica tres veces mas su costo, y en 5 años ya se encuentran muchas de ellas deteriorada.
En la actualidad se lanzan proyectos inmobiliarios de parte del Estado, pero siguen siendo parches y no soluciones reales para la clase obrera.»
Desde el grupo comentan que siguen «trabajando para la confirmación definitiva de este proyecto que nace aproximadamente hace un año y medio en Montevideo»
En la actualidad el grupo tiene representación en Montevideo, Lavalleja, Colonia, Cerro largo, Paysandú y Maldonado.