El vallado del puerto de Carmelo convocó a una reunión entre fuerzas vivas, vecinos, la presencia del Jefe Regional de la Zona Oeste de la Dirección Nacional de Hidrografía Walter Gallo junto al Jefe del Atracadero Carmelo Marcelo Susena, recibidos en la tarde de hoy por los concejales y Alcaldesa en el Municipio de Carmelo.
Los vecinos presentaron una propuesta que será incluida en un expediente que se formará en Hidrografía pero también se buscará llegar por vía directa al Ministro de Transporte y Obras Públicas, para poder concretar un acuerdo que contemple las directivas internacionales a cumplir y a su vez no ocasionar un daño urbano y estético en una zona emblemática donde incluso está la grúa considerada monumento histórico nacional por orden presidencial.
Los funcionarios Gallo y Susena se mostraron receptivos pero explicaron que la decisión final dependerá del Director Nacional de Hidrografía, cargo que se encuentra vacante, debido al fallecimiento del ex director Jorge Camaño, ocurrido en abril de este año.
En la actualidad se viene implementando las vallas móviles, que están delimitando el lugar, hasta alcanzar la línea amarilla que ya está marcada «estamos buscando cierta flexibilidad por los usos y costumbres que se dan en el puerto para no generar un shock. Nos parecía algo hostil que no generaba una decisión consensuada», explicó el Jefe Regional Walter Gallo.
La zona del empedrado está cada vez peor y el arreglo sería importante, no está previsto trabajar ahora en ese sector, que luego de las inundaciones quedó muy mal. El mejor de los escenarios para intervenir allí es en el mediado plazo dicen los funcionarios, hay un problema muy serio de socavación, indicaron.
La propuesta
Los vecinos presentaron una propuesta resumida en un plano donde delimitan un nuevo espacio del recinto portuario. La idea surge en que la utilización que se dio en el pasado se fue perdiendo, con una actividad donde había otra vinculación portuaria con Buenos Aires la realidad hoy nos indica que solo es una terminal de pasajeros.
La propuesta apunta a reducir el área del recinto portuario, en ese sentido la idea es reabrir el diálogo y comprender lo que se está haciendo hoy. Hay una línea amarilla que delimita los espacios. El futuro dirá cómo se solucionará ese espacio en discusión. Voluntad de diálogo hay, la decisión final no depende, sin embargo, de ninguno de los que hoy estaban presentes en la reunión del Municipio.