El Centro de Control del Puerto de Carmelo realiza las tareas de control establecidos en el
Reglamento de Uso y Navegación de los Canales de Martín García, ¿pero que sucede si una de esas embarcaciones tiene un accidente ambiental?, ¿qué capacidad de respuesta puede tener la Prefectura de Carmelo ante un hipotético escenario de fuga de combustible o sustancias químicas en cercanías?, ¿cómo supervisa y controla la elaboración y actualización de los planes regionales y locales de control de contingencias por derrames de hidrocarburo y otras sustancias liquidas o a granel vertidas en el medio acuático.?
En el marco de una invitación para hablar sobre el medio ambiente en Carmelo y su zona el Prefecto de Carmelo Capitán de Navío Juan Montero fue claro al definir el estado de situación de la Sub Prefectura de Carmelo sobre los recursos humanos y materiales para enfrentar una situación de accidente ambiental en el río; «estamos en la lona», dijo.
Montero explicó sobre su jurisdicción y dijo que «el Estado asigna unos 30 tripulantes para custodiar el Río de la Plata. Si amplían nuestra jurisdicción nos tendrían que dar más medios para trabajar.»
El jerarca comentó que «el servicio de Hidrografía y Meteorología de la Armada que funcionaba en Montevideo con excelente maquinaria dejó de hacerlo por carecer de funcionarios para realizar los análisis de combustible.»
«Cuando sucede un hecho en Nueva Palmira -explicó- donde surgen manchas de combustibles y de diferentes tipos, tengo que coordinar con la DINAMA (Dirección Nacional de Medio Ambiente) para que lleven a analizar las muestras. La mayoría de las veces no la analizan porque no lleva la temperatura adecuada, desde que salió de Nueva Palmira, hasta Montevideo. No va con los frascos adecuados,» explicó.
El Prefecto de Carmelo comentó que «hasta hace unos quince años en cada Prefectura habían kits de lucha contra la contaminación. Teníamos todo y se fue eliminando los mismos y hoy no hay rubro para comprar equipamiento.»
«Nosotros somos reactivos, después que pasan las cosas vamos y compramos lo que necesitamos. Hicimos cursos en el extranjero, en países como Brasil, Argentina y Estados Unidos sobre la industria y la contaminación. Allí nos compraron materiales pero éstos se fueron desgastando y en la actualidad no tenemos nada,» concluyó.