“Se debe hacer un gran trabajo de diferenciación para que Uruguay no se vea sumido en la situación general del vecindario y para evitar consecuencias negativas”, advirtió el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori. También comparó la expansión acumulada de 16 % del producto interno bruto (PIB) del país de 2011 a 2017 con la retracción en torno a 2 % de Argentina y Brasil. Asimismo valoró el crecimiento por habitante.
“El período 2011-2017 fue cuando se gestó la diferenciación de Uruguay con sus vecinos”, señaló Astori en su presentación, este miércoles 23, en un desayuno de trabajo en la Cámara de Comercio Uruguay-España. Enfatizó que, en esos años, el PIB del país creció un 16 %, mientras que los de Argentina y Brasil decrecieron alrededor de 2 %. “La diferencia es extraordinariamente importante”, recalcó.
Con respecto al producto por habitante, expresado en términos de paridad de poder de compra, el ministro de Economía y Finanzas explicó que, «mientras Argentina exhibe un crecimiento en ese período del 4,5 % y Brasil del 2,8 %, en Uruguay se supera el 25 %.
En otro tramo de su exposición analizó el contexto de volatilidad e incertidumbre que existe en el mundo y, en particular, la situación en América Latina, con importantes desafíos macroecómicos tanto en Argentina como en Brasil. «Las expectativas no auguran una recuperación rápida de esos dos países”, lamentó.
Astori indicó que el crecimiento económico de Uruguay superó las previsiones y “lo ha diferenciado del vecindario”. Al respecto, repasó que el PIB de este país “creció un 3,4 % en el último trimestre de 2016 y un 4,3 % entre enero y marzo”. Valoró el papel importante que en esta expansión “han jugado sectores como el transporte, almacenamiento, comunicaciones, comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles y actividades primarias, como la agroindustria alimenticia”.
“El aporte de los servicios está siendo absolutamente fundamental”, subrayó, tras reconocer que es importante trabajar para consolidar esta tendencia en aspectos como la inversión en maquinarias y equipos y sobre el núcleo duro de la industria manufacturera, “que aún no muestra una tendencia que pueda asegurar la recuperación sostenida”.