La nueva escala de valores máximos para acceder a programas habitacionales existentes considera ingresos de 40 unidades reajustables (UR) para una persona, 60 para el caso de dos, 72 para núcleo familiar de tres miembros, 84 para cuatro y 96 para cinco o más, explicó la ministra de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Eneida de León, tras el Consejo de Ministros de este lunes 23 en la Torre Ejecutiva.
La ministra De León anunció que la cartera a su cargo aprobó una resolución que aumenta los ingresos máximos de personas y núcleos familiares para acceder a programas habitacionales, con el objetivo de que más ciudadanos puedan hacerlo.
En el marco del anuncio, explicó que hasta ahora existía un tope de ingresos único de 60 UR, equivalentes hoy a casi 61.000 pesos, que no contemplaba la composición del núcleo familiar. “Ahora hacemos hincapié en el ingreso per cápita y no en un ingreso único”, explicó la jerarca.
En tal sentido, la nueva escala va desde 40 UR, unos 41.000 pesos, para un integrante, 60 para dos, 72 para tres, 84 para cuatro hasta 96 para cinco o más miembros del núcleo familiar.
La funcionaria destacó que esta nueva resolución contempla la realidad de muchas familias. La modificación avanza en la dirección de profundizar las políticas y alcanzar metas comprometidas por el Gobierno en el Plan Quinquenal de Vivienda 2015-2019, en cuanto a la implementación de planes de vivienda y hábitat que contemplen la heterogeneidad de los hogares a los que están dirigidos.
Agregó que la integración de las familias destinatarias de los programas habitacionales del ministerio constituye una variable relevante para determinar quiénes pueden acceder a estos planes.
De León indicó también que una evaluación de la normativa vigente hasta ahora identificó la necesidad de realizar cambios que permitirán ampliar el acceso a los programas de vivienda, sobre todo a aquellas familias más numerosas, lo cual, a su vez, lo hace más consistente con la política de subsidio.
Es así que se ha resuelto ampliar el tope de ingreso que se acepta para postular a los programas habitacionales, en particular para aquellos hogares que tienen mayor número de integrantes, señaló.
De ese modo, se extiende el acceso a hogares pertenecientes a los quintiles sociales de menores ingresos, que bajo la normativa anterior quedaban excluidos del acceso a los programas habitacionales, y se contribuye al conjunto de las políticas sociales del país que procuran una distribución más justa de los ingresos y de la riqueza.