Desde este lunes 27 de noviembre la antesala del Municipio de Carmelo donde se encuentra la División de Arquitectura lleva el nombre de Arquitecto Heriberto Spósito.
El Secretario Privado del Intendente Moreira el señor Guillermo Rodríguez, junto a la Alcalde Alicia Espíndola, un familiar de Spósito y Rosario Musso del Comité Patriótico Femenino se encargaron en descubrir la placa de reconocimiento al arquitecto local donde aparece el nombre y la frase «Orgullo de la Arquitectura Nacional».
Hubo palabras alusivas al acontecimiento por parte de la Alcalde Espíndola, la señora Musso por el Comité Patriótico, el Arquitecto Rodríguez por la Sociedad de Arquitectos del Uruguay. Se presentó un video de su obra y también se destacó la participación del Coro Santa Cecilia, junto a una presencia inter institucional diversa y masiva que llenó la sala.
El Arquitecto
El reconocido arquitecto William Rey no estuvo presente pero se leyó una carta de su autoría escrita especialmente para este acto.
Rey menciona que «una parte importante de lo producido por Spósito debe rastrearse en la enseñanza universitaria recibida en el taller Aroztegui y también por la ascendencia que sobre él tuvo otro importante docente: Miguel Àngel Odriozola. Ideas como el valor de la estructura, la importancia visual de los materiales y la utilización sistemática de la sección áurea, lo han acompañado de manera permanente a lo largo de toa su labor profesional, materializándose esos conocimientos en una alta diversidad de proyectos.»
Rey pasa revista a sus primeras obras vinculándolo con el Arq. Leonel Oronoz, «con él realiza, en el año 1961, la vivienda para su padre en Carmelo, ubicada en la calle Sarandí y General Flores, lindera a la que realizará más tarde para él mismo. Se trata de dos proyectos de enorme integración formal y visual, que adquieren un singular valor como tramo urbano. En esta obra se presentan magníficos detalles de resolución constructivista, como los distintos planos que aportan autonomía visual a los muros. En su interior, también se verifican búsquedas como la diferenciación de ámbitos a partir de planos autónomos, livianos, de diferente material, que le permiten al espacio fluir entre los mismos.»
Los años sesenta y setenta
En la década de 1960 – dice William Rey- «Spósito proyecta otra vivienda, en esta caso para la familia Sarachu. En esta casa propone una solución casi neoplástica, que hace de esta vivienda un elemento particular de la edilicia de Carmelo. Ya en la década del 70, produce otra obra de acotadas dimensiones, pero no por eso de menor valor o interés, ubicada sobre la calle Uruguay. En este aso, la simplicidad está acompañada de una pureza general de líneas y, también, de detalles como lo es el muro curvo y opaco que contiene la escalera, haciéndose comprensible desde el exterior. Todo en Spósito fue siempre así: el resultado de una acción medida, donde la toma de decisión respondió siempre al control y la reflexión lenta, meditada, bien ponderada.»
La obra más importante
El profesor Rey se juega en su trabajo titulado «A la Memoria de un gran arquitecto: Heriberto Spósito», en seleccionar su obra más importante y dice » quizá la obra residencial más importante de éste arquitecto sea ,a vivienda realizada para él mismo, sobre las márgenes del arroyo de las Vacas. Se trata de una obra que recoge la experiencia formal y proyectual propia de fines de los años setenta. Lo mejor de esta vivienda se centra en su volumen y las articulaciones establecidas para ajustarse al tipo y forma del padrón, aportando un elemento muy singular al paisaje fluvial que la rodea.»
«Otras obras importantes realizadas por Heriberto Spósito son, sin duda, la casa de campo para la familia Irurtia en las afueras de Carmelo, el comercio Igoa y la vivienda para su hermano ubicadas ambas en la calle Uruguay.»
La obra social
«Desde su labor como técnico municipal, Spósito realizó cambios en el trazado de la plaza de las Naciones y diseñó el pavimento de la Plaza Artigas, que esta mantiene hasta hoy. Los temas urbanos y su debate permanente fueron su interés tanto como el ejercicio de proyectar y dirigir obras de arquitectura. Esto hizo de el un profesional actualizado, preocupado por las lógicas del lugar y de identidad local»
El futuro
El Arquitecto William Rey reflexiona finalmente sobre el futuro de sus obras «verdadero patrimonio de la ciudad de Carmelo, que debe ser preservado, estudiado y divulgado para las nuevas generaciones.»
«Carmelo se debe asimismo un inventario de sus mejores edificios, que involucra a su arquitectura residencial, industrial y pública. En ese patrimonio urbano no sólo es excepcional lo que la pátina del tiempo ha descubierto; también lo es una producción arquitectónica singular que quizá no sabemos ver y apreciar aún. Me refiero a la arquitectura más cercana en el tiempo, la arquitectura moderna, entre la que está casi en primer lugar, la obra de Heriberto Spósito. El mejor homenaje que Carmelo y el Departamento de Colonia puede hacerle a ese gran profesional será, sin duda, saber integrar su producción edilicia al mejor patrimonio histórico y cultural de la ciudad. Que así sea entonces!!», dice Rey.