Eduy21, el movimiento ciudadano liderado por el exsubsecretario de Educación, Fernando Filgueira, una asociación integrada por académicos y exfuncionarios de distintos gobiernos que pretende impulsar una hoja de ruta para aplicar en la educación a partir de 2020, llegó a Carmelo el pasado sábado.
Invitado por «Banderas de Líber» del Frente Amplio, aunque su charla en el Club Unión de Carmelo no fue una actividad partidaria, sino centrada en Eduy21 que acepta invitaciones de partidos de diversas tiendas, instituciones gremiales, comerciales y un amplio etcétera, Filgueira dio su diagnóstico alejado del prejuicio y de los preconceptos.
Fue contundente en mostrar la realidad de los números e interpretarla en una sala que debió tener más docentes, más ciudadanos interesados por un tema vital para nuestro futuro: la educación.
El sociólogo explicó «que nuestro sistema educativo no está preparado ni preparando a las nuevas generaciones para los desafíos del siglo XXI. La educación uruguaya no puede suprimir las desigualdades de origen, puede contribuir a disminuirlas, a moderarlas, pero hoy nuestro sistema educativo tiende a agudizarlas.»
El mundo que se viene
Uruguay no está preparando a sus jóvenes para el mundo que viene, ni siquiera para el actual, se trasmite un conocimiento fragmentado que es evaluado a través de la memoria y la repetición mecánica de un conjunto de rutinas, sugiere el experto.
«El sistema en la educación media está pensado como un filtro hacia la Universidad, pensado para las élites, ha sido exitoso, sólo el 40% de los estudiantes egresan. Este era el modelo antiguo pero hoy no hemos construido uno nuevo.Primaria construía ciudadanía y disciplinaba,» historió.
Filgueira cuestiona a la repetición como modelo de filtro y sostiene que no es un elemento pedagógico «la repetición no mejora al chiquilín, está pensado como un mecanismo de freno porque no acreditaste saberes. Si la educación media tiene que construir ciudadanos para el siglo XXI, al igual que lo hizo Primaria para el siglo XX, la idea de filtrar para la Universidad tiene que ser dejada de lado. Lo importante es proteger al chiquilín, ayudarlo para que aprenda lo que no está aprendiendo, pero no frenarlo en el proceso.»
Los números
En sexto de la escuela los niños repiten entorno al 2 y 3%, pero en primero de liceo repiten el 30%, «acá hay un cambio de reglas de juego brutal porque los sistemas definen su criterio de evaluación. Fíjense en Primaria como ponen un ejercicio de Matemática, es el almacenero al que le tengo que comprar tantos caramelos. Pasan a Secundaria y es x igual a 6 más 4. Pasó de un modelo vinculado a la experiencia cotidiana a otro de salto abstracto muy marcado.»
«Al ritmo que vamos el egreso del Ciclo Básico no será universal hasta el año 2030, nos habíamos propuesto que lo sería al final de este período de gobierno. El del bachillerato -si todo sigue así- será en el 2050, lo cual sería una catástrofe, estoy convencido que podemos cambiar esto», precisó Filgueira.