El ajuste de tarifas de Ancap vigente a partir del 1.° de enero “se justifica en la evolución de las dos variables macroeconómicas clave que determinan la estructura de costos”, como el crudo Brent y el tipo de cambio, que se encarecieron 35 %, explicó el ente en un comunicado. Por primera vez se transparentan los mecanismos de ajuste que buscan garantizar la sustentabilidad de las finanzas y hacer más competitiva la empresa.
A través de un comunicado difundido este jueves 7, Ancap explica que el ajuste de sus tarifas de combustibles “se justifica en la evolución de las dos variables macroeconómicas clave que determinan la estructura de costos de Ancap, en línea con lo que sucede en el contexto internacional: el crudo Brent y el tipo de cambio”.
Estos costos aumentaron 35 % aproximadamente “respecto a las premisas utilizadas para el último ajuste realizado a mitad de 2017”. “Se busca así garantizar la sustentabilidad de las finanzas para que Ancap sea cada vez más competitiva”, indica la empresa.
Además, “por primera vez” Ancap logró transparentar los mecanismos de ajuste que se aplicarán durante el año “en función de las variables que no puede controlar, comprometiéndose de esta forma a obtener ciertas eficiencias y resultados que dependen de la gestión”.
Al fijar esta paramétrica, el ente manifestó su compromiso en “reducir costos estructurales en 25 millones de dólares anuales respecto a 2016”. Recuerda que esto “no es comparable con 2017 por haber sido un año atípico, marcado por el paro técnico” de la refinería de La Teja.
El directorio de Ancap aprobó este jueves la propuesta de ajuste de sus combustibles en el marco de la definición de tarifas públicas anunciada por el Poder Ejecutivo. El gasoil, kerosene y fuel oil subirán 4,8%, valor por debajo de la inflación.
En tanto que las naftas se incrementaran 9,8 % y el supergás lo hará 15 %, pero manteniendo la tarifa actual en los sectores socioeconómicos más vulnerables. Los nuevos precios entrarán en vigencia a partir del 1 de enero de 2018.
“Con estas nuevas tarifas se busca mejorar las brechas frente a los precios internacionales de mercado (paridades de importación) que en definitiva determinan la competitividad. En el caso del gasoil la brecha era significativa y es por ese motivo que se volcó un mayor aumento sobre las naftas”, concluye el comunicado.