Muchas personas tienden a pensar que no consumir gluten -la proteína que se encuentran en el trigo, la cebada y la avena- es beneficioso para el organismo. Sin embargo, al parecer no están en lo correcto.
Según afirmó Suzanne Mahady, científica y gastroenteróloga de la Universidad de Monash, en Australia, no existe evidencia científica de que una dieta libre de gluten sea beneficiosa para la salud de quienes no padecen enfermedad celíaca y, por lo tanto, no son alérgicos a dicha proteína.
En un artículo que publicó en el sitio The Conversation, Mahady señaló que en el caso particular de Australia, un 1% de la población es celíaca, pero alrededor de un 11% de los habitantes siguen una dieta libre de gluten porque esta es percibida como «una alternativa más saludable». No obstante, la ciencia no ha logrado demostrar que eso sea realmente así.
En este sentido, la especialista recordó los resultados de algunos estudios, como uno realizado en EE.UU. que demostró que una dieta libre de gluten no está asociada a un corazón más saludable y otro que arrojó que las personas con menor ingesta de gluten, tienen mayores tasas de diabetes tipo 2.
«¿Por qué las dietas libres de gluten son tan populares?», se pregunta Mahady. Para responder la interrogante, la gastroenteróloga diferencia entre quienes padecen la enfermedad celíaca y quienes son intolerantes al gluten. En el caso de los primeros, la ingesta de la proteína daña el intestino, mientras que para los segundos solo genera malestares como hinchazón.
Sin embargo, existe la impresión entre los especialistas de que muchas personas que dicen ser intolerantes o sensibles al gluten, en realidad tienen la sensación de que la ingesta de esa proteína les hace mal para la salud, pero no lo han comprobado realmente.Otra razón para el éxito de estas dietas, sostiene Mahady, es que muchos de los productos que contienen gluten -pasteles, galletas, cerveza, etc.-, se asocian con una alimentación poco saludable. De esta manera, al dejarlos, las personas sienten que cuidan más su organismo.
Eventuales daños
La gastroenteróloga incluso va más allá y plantea que quienes dejan el gluten sin ser celíacos, pueden dañar su salud. «Evitar los granos integrales incide en una baja ingesta de fibra, lo que puede ser perjudicial», sostiene.
En este sentido, la recomendación de Mahady para quienes insisten en llevar una dieta libre de gluten sin padecer la enfermedad celíaca, es combinar productos que presenten la proteína con otros que no, para así tener una dieta variada.
Consultada sobre el tema Ana Claudia Villarroel, nutrióloga de Clínica Santa María, coincidió en dejar de comer gluten sin ser alérgico a él es «poco productivo». «No hay una necesidad médica al hacerlo, se justifica probar, por ejemplo, si te dicen que tienes colon irritable, ahí se pueden sacar algunos alimentos y entre ellos eliminar los que tienen gluten», señaló.
La especialista además aclaró que «los alimentos que tienen gluten contienen muchos componente más, entonces si tú te sientes mal por comer alguno de esos alimentos, no necesariamente va a ser por el gluten, puede ser por otro ingrediente del producto».