Finalizada la primera etapa de información y advertencia sobre la ilegalidad de ingresar a las playas con vehículos, la Dirección de Medio Ambiente, Prefectura e intendencias comenzaron a controlar esta práctica, habitual en verano. La infracción prevé multas de entre 5 y 25 unidades reajustables, que pueden incrementarse en 50 % en casos de reincidencia, y la incautación del vehículo hasta el pago de la sanción.
La Dirección Nacional de Medio Ambiente junto a la Prefectura Nacional Naval y las intendencias de departamentos costeros comenzaron a controlar el cumplimiento de la normativa que prohíbe el ingreso de vehículos a las playas.
Luego de la primera etapa de información y advertencia, en la cual se colocó cartelería, sistemas de barreras, y se entregaron recipientes para colocar los residuos, en los peajes, las autoridades realizan recorridas por las playas en las cuales estás prácticas ilegales son recurrentes.
Según el titular de la Dinama, Alejandro Nario, ambas etapas (informativa y fiscalizadora) son procedimientos habituales en las temporadas estivales. Resaltó, en ese sentido, el incremento de las denuncias que realiza la población. El involucramiento de la gente con los temas ambientales es significativo, aseguró.
Explicó que a partir de este año las multas que aplica la Dinama (de entre 5 y 25 unidades reajustables) podrán incrementarse hasta en un 50 % en cada reincidencia. “Tampoco es la misma multa para una moto que para una maquinaria pesada”, aclaró.
Asimismo, los funcionarios encargados de controlar las infracciones podrán secuestrar el vehículo infractor que solo será liberado una vez que el propietario responsable acredite el pago de la multa impuesta y el reembolso de los gastos del traslado del vehículo y su depósito.
Por otro lado, luego de lo ocurrido el verano pasado con la fiesta de Corona, donde no se respetó la normativa y se ocasionaron daños al sistema dunar, los empresarios interesados en realizar ese tipo de eventos en esta temporada se reunieron con la Dinama buscando acordar los lugares aptos para concretarlos.
“Nosotros no estamos en contra de que se realicen fiestas ni mucho menos, nos parece una actividad lúdica que le hace bien al país, que la gente se divierta y lo haga de manera sana sin afectar nuestros ecosistemas ni nuestro sistema dunar”, aclaró.
Otro aspecto destacado por Nario fue la insistencia en involucrar al vecino para que actúe si observa una falta a la normativa, para que utilice las bajadas a la playa marcadas por las intendencias (si lo hace a pie) o para que no utilice leña de los montes costeros.