Te piden amistad en redes sociales, algunas te proponen sexo «on line» y te piden fotos y vídeos íntimos. A partir de ahí empieza el calvario, amenazándote con publicarlas en tus contactos. Para eso te extorsionan y piden dinero. Muchos caen en la trampa.
Quienes caen no manejan bien los códigos de las redes sociales, donde muchos aceptan al ver una mujer atractiva que sin mediar palabras comienza a establecer contacto contigo.
En determinado momento las charlas suben de tono, algunas te envían fotos de contenido sexual, para luego pedirte que envíes las tuyas y luego proponen conectarte a la webcam para tener una sesión de sexting.
Sexting (contracción de sex y texting) es un anglicismo que se refiere al envío de mensajes sexuales (eróticos o pornográficos), por medio de teléfonos móviles. Inicialmente hacía referencia únicamente al envío de SMS de naturaleza sexual, pero después comenzó a aludir también al envío de material pornográfico (fotos y videos) a través de teléfonos celulares y computadoras.
Es ahí que se consume la extorsión y estafa virtual, fenómeno consolidado en las redes sociales en todo el mundo. Una vez que la persona se hace de tus fotos íntimas o vídeos te advierte que si no le depositas dinero las publicará en todos los sitios posibles, además de enviarte ese material a familiares y amigos.
El pasado lunes ingresó a la Seccional Tercera de Policía de Carmelo una denuncia de un caso similar, de un ciudadano manifestando que desde una semana venía entablando diálogo a través de Messenger con una persona de sexo femenino que le había pedido grabaciones personales a lo que este accedió. Posteriormente, indica la policía le solicitó bajo amenaza de publicar dichos videos la realización de un giro, a lo que este habría accedido. Posteriormente recibió un nuevo llamado para que entregara más dinero. El individuo realizó la denuncia correspondiente, estando el caso en proceso de investigación.