Con la aplicación del nuevo Código de Proceso Penal (CPP ley nº 19.120 y modificativas) se está experimentando una notoria caída en la eficacia del sistema penal con la consecuente baja en el índice de resolución de delitos. Por esta razón la baja que se ha constatado en el número de personas privadas de libertad no puede ser considerada como una buena noticia. Así lo explicó el Ministro de la Suprema Corte de Justicia, Dr. Jorge Chediak, en una entrevista televisada en la mañana de ayer por Canal 4.
Haciendo precisiones respecto de los conceptos que había vertido días atrás ante el Parlamento Nacional sobre el funcionamiento del nuevo Código de Proceso Penal (CPP), el Dr. Chediak dijo “no he dicho que esté funcionando mal, sino que he dicho que está funcionando lento”.
“Dentro de las previsiones que hicimos, ustedes recordarán, habíamos pedido disculpas anticipadamente por las eventuales dificultades que un cambio de régimen tan radical pudiera traer aparejado” puntualizó.
“Como ya hay una veintena de países hermanos que han hecho esta reforma, nosotros estábamos alertados de las dificultades operativas que en los primeros meses y los primeros años traen aparejados estos cambios de modalidad procesal”.
“Uno de estas dificultades, que no es menor, y lo estamos viendo, es que baja la eficacia del sistema, eficacia que se mide entre la cantidad de delitos que se denuncian y la cantidad de sentencias condenatorias que termina habiendo en un período determinado” dijo el algo magistrado.
“Uruguay tenía una tasa bastante razonable de condena, de eficacia de sus sistema penal en relación a la región. Lo que hemos visto a partir del 1º de noviembre es una baja importante en el número de delitos, por los que antes se decía que se procesaba y ahora decimos que se encauza (se formaliza)”.
Respecto de eficacia del sistema reconoció la existencia de “una baja importante en noviembre y diciembre, una leve mejoría en enero y febrero, y algunas cifras indican que podría seguir habiendo una mejoría en marzo, pero estamos muy lejos del número de delitos que terminaban judicializados hasta el 31 de octubre (del año pasado)”.
“Eso ha determinado, entre otras cosas, y así lo ha dicho el Sr. Comisionado Parlamentario para el sistema carcelario, que después de muchos años de subir y haber estado en una meseta de cerca de 11.000 personas privadas de libertad en los establecimientos carcelarios del Uruguay, hoy tenemos ochocientos presos menos”.
“Si se delinquiera menos, es una buena noticia que hubiera menos presos. Si se aplicaran efectivamente los mecanismos del principio de oportunidad, es decir, de seleccionar dónde concentrar la acción del Estado y entonces usamos medidas alternativas en determinadas situaciones en lugar de privar de libertad a los delincuentes, entonces hubiera sido una buena noticia” subrayó Chediak.
“El problema es que ha bajado la población carcelaria porque el sistema está funcionando más lento y por ende hay una tasa de resolución de delitos y de encausamientos más baja de la que teníamos en octubre. Esa fue mi preocupación. No fue una crítica, sino una preocupación que expresé como ciudadano” concluyó.