Se trata de una propuesta, presentada el viernes 29 de junio, que permite que ya no sea necesario interactuar con el guarda o el chofer, ya que simplemente, pasando el celular o la tarjeta prepaga inteligente por los lectores (al subir y al bajar del ómnibus), el costo del boleto correspondiente se debitará automáticamente.
ISBEL S.A., empresa uruguaya con más de 30 años en el mercado tecnológico, fue la ganadora entre las empresas que se presentaron al llamado de la Intendencia y la ANII (denominado “Desafío Ciudades Inteligentes”), que buscaba mejorar la experiencia del usuario del Sistema de Transporte Metropolitano. Según nos cuenta, Isabela De Cola (líder del equipo de desarrollo de software del proyecto dentro de ISBEL), “a la etapa inicial (el concurso de ideas) se presentaron 24 propuestas, de las cuáles fueron seleccionadas 12 que pasaron a la etapa de proyectos. Finalmente fueron 10 los proyectos presentados y de ellos fue elegido el nuestro”.
Este prototipo fue “una puesta en marcha de nuevas tecnologías como NFC (tecnología de pago mediante el teléfono celular) y RFID (tecnología mediante la cual se pretende poder determinar el nivel de ocupación de cada unidad en tiempo real)”, agregó Isabela. En efecto, los usuarios podrán saber la ubicación de los vehículos y una estimación de la cantidad de pasajeros que se encuentran a bordo del mismo. Además, gracias a la pantalla a bordo, se mostrará el tiempo de llegada a las distintas paradas y las posibles combinaciones con otras líneas de ómnibus.
También los mencionados monitores, reproducirán videos con temas de actualidad e informarán sobre los puntos de interés cultural por donde va circulando el medio de transporte. Por otra parte, el conductor o guarda, contará con una “Tablet” que le permitirá realizar tareas de gestión y controlar las transacciones que realizan los pasajeros.
La línea 169 de Montevideo fue utilizada para probar el sistema
La propuesta diseñada por ISBEL se puso a prueba con éxito en un ómnibus de la línea 169 (que fue desde la Terminal Ciudadela hasta la Estación Goes), aunque aún se desconoce cuándo comenzará a implementarse efectivamente. “El prototipo llevó 6 meses de análisis, implementación, testeo y puesta en marcha. Ya fue presentado y ahora está en manos de la Intendencia y de los diferentes actores del transporte la decisión de implementar la solución completa”, añadió De Cola.
A su vez, Isabela afirmó que “al ser un prototipo, y contando con un presupuesto limitado para la realización del mismo, algunas de las funcionalidades previstas del sistema se acotaron: solo se dispuso del hardware para una única unidad, se permite únicamente la actualización de la lógica de cobro (la propuesta para el proyecto final abarca cambios en la lógica de admisión, de recorridos y de los contenidos multimedia a presentar en la pantalla que se encuentra dentro de la unidad), se consideran únicamente usuarios comunes y viajes céntricos, de una y dos horas. Y también se han dejado de lado aspectos más técnicos como la interfaz de comunicación con los sistemas de la intendencia”.