Uruguay «no se va a negar» a la posibilidad de reunirse con el Grupo de Lima para «conjuntar esfuerzos» que ayuden a encontrar «caminos de entendimiento» en la crisis venezolana, afirmó este martes a la prensa el canciller de ese país, Rodolfo Nin Novoa.
«Puede ser momento sí porque el Grupo de Lima también se ha dado cuenta que no ha podido avanzar.
Nosotros por lo menos tenemos la posibilidad de enviar gente a Venezuela, ya han ido misiones electorales, misiones de ayuda humanitaria y algo hemos hecho», detalló el canciller.
Las declaraciones de Nin Novoa surgen tras el comunicado del Grupo de Lima del pasado 3 de mayo, en el que llamó al Grupo Internacional de Contacto (GIC) -que Uruguay integra junto a la Unión Europea (UE) y países de Europa y América Latina- a una reunión urgente «con el propósito común de lograr el retorno a la democracia en Venezuela».
«Lo que han tratado de hacer otros no ha tenido el éxito que desearían tener entonces hay un llamado ahora a ver si podemos conjuntar esfuerzos y si la vocación de Uruguay es el diálogo no se va a negar a esa posibilidad», acotó el canciller uruguayo.
Asimismo, el ministro dijo que la postura de la oposición venezolana de no querer dialogar «es un obstáculo» pero que la negociación «es el único camino».
«¿Por qué alguien supone que el presidente (Nicolás) Maduro se va a ir graciosamente del Gobierno y va a decir ‘les entrego el Gobierno y yo me voy’? No va a pasar eso, entonces la única manera que hay es negociar, salvo que se quiera sacar por un Golpe de Estado, una guerra civil o por una invasión de una potencia extranjera, cosa que rechazamos», afirmó.
En este sentido, Nin Novoa detalló que su país siempre va en busca de caminos «de diálogo» ya que entiende que este «es el rol» que el país juega en Latinoamérica y el mundo.
El canciller sostuvo que desde el Gobierno uruguayo cada vez están «más convencidos» de su rol frente a la crisis venezolana.
Según Nin Novoa, hay «tres actitudes» que se puede tener: no darle importancia, conformarse con sacar algún comunicado rechazando las violaciones a los derechos humanos cada algún tiempo o tener «una diplomacia activa», que es la postura que decidió tomar su país.
«Uruguay no quiere protagonismos, de ninguna manera. Uruguay lo que quiere es acentuar su vocación pacificadora y ayudar a solucionar los problemas que hay en la región. Si podemos hacerlo, lo haremos y siempre estaremos dispuestos a ese camino de entendimiento y de diálogo que hemos planteado hace mucho tiempo», concluyó. (EFE)