Uno de los tres trabajadores de Petrobras Uruguay que se encuentran haciendo una huelga de hambre desde el pasado 30 de abril en reclamo por su situación laboral ante la salida de la empresa brasileña del país abandonó este sábado la medida por recomendación médica y fue internado en un sanatorio.
El hecho se produjo luego de que los resultados de los análisis de rutina que se le practicaron a Ernesto Sasías, de 44 años, tuvieran los «valores alterados», explicó a la prensa Julia Galzerano, médica de la Comisión de Derechos Humanos del Sindicato Médico del Uruguay (SMU).
Por su parte, el dirigente de la Unión Autónoma de Obreros y Empleados del Gas Alejandro Acosta dijo a Efe que, en un principio, Sasías no tomó bien la idea de tener que retirarse, porque quería continuar con la medida.
Sin embargo, resaltó que tras una conversación, el trabajador entendió que sus compañeros necesitaban que se recuperara.
«Volverá a estar luchando con nosotros desde el lugar que le quepa», apuntó Acosta.
Asimismo, subrayó que los otros dos huelguistas lo tomaron «como algo natural dentro de lo que es la medida, en el sentido que ningún organismo es igual que otro» y que ellos «están decididos a continuar, porque hay un objetivo que es levantar los despidos».
Respecto a la salida del conflicto, Acosta señaló que estas siempre «son difíciles».
«Acá hay muchas partes involucradas y te diría que por experiencias anteriores no va a haber una salida en el corto plazo, pero si estamos convencidos de que va a haber una salida que evite los despidos», concluyó.
Este viernes, durante una reunión entre representantes de la central sindical uruguaya, el Pit-Cnt, y de Petrobras, la empresa brasileña ratificó su decisión de despedir trabajadores.
Luego del encuentro, el presidente de la central sindical, Fernando Pereira, dijo que desde el Pit-Cnt plantearon la opción de que los despidos fueran suspendidos y se prorrogara el seguro de desempleo a los trabajadores, algo en lo que Petrobras no estuvo de acuerdo.
La empresa brasileña es la controladora de la Distribuidora de Gas de Montevideo (DGM), de la que tiene un 100 % del capital, y de la igualmente distribuidora de gas Conecta, de la que tiene un 55 %. La petrolera estatal brasileña anunció el 26 de abril la venta de nuevos activos que incluyen 8 refinerías en Brasil y la red de puestos de gasolina PUDSA en Uruguay. (EFE)