El planteo de contratar una terna de jueces profesionales de Montevideo, para así descomprimir las exigencias de los jueces locales no tuvo mayores adhesiones y ahora la pelota queda nuevamente en la Liga Carmelitana de Fútbol que deberá decidir el lunes cómo solucionar la seguridad desde el punto de vista planteado por los árbitros locales.
Es que los jueces locales se habrían plantado y estarían marcando condiciones para arbitrar, algunas de ellas que serían propias de las decisiones que tendrían que tomar los delegados de clubes y no quienes imparten justicia en el terreno de juego, señaló una fuente crítica en este asunto que fue consultada por nuestro portal.
En definitiva los hechos violentos sucedidos en un grupo de parciales ponen en crisis el modelo de funcionamiento, sumado a que los jueces se estarían negando a arbitrar de no prosperar una serie de medidas que pide ese colectivo.
La reunión del lunes podría marcar un antes y después del fútbol local que viene recibiendo fuertes miradas críticas desde hace un tiempo y que tuvo uno de los episodios más resonados con el informe contable que dejó dudas en varios actores del fútbol, agregando ahora la gestión de la seguridad pública.