El futbolista uruguayo Giovanni González reconoció que se queda con un sabor amargo al no haber podido vencer a Japón en su debut en partido oficial con la selección de Uruguay.
González, que ingresó al terreno de juego en el primer tiempo para sustituir al lesionado Diego Laxalt, indicó a pesar del empate a dos goles en el segundo partido de Uruguay en la Copa América, «todos los jugadores se pueden mirar los unos a los otros a la cara porque cada uno dio lo mejor de sí».
El futbolista del Peñarol destacó de Japón que «es un equipo muy intenso y dinámico, con un gran trato de pelota y una gran velocidad», además de que fueron muy eficaces.
González relató que entró a la cancha «por ahí algo nervioso o ansioso». «Pero luego me fui afianzando, entrando en confianza y después ya me quedé más tranquilo», indicó.
El futbolista explicó que el seleccionador de Uruguay, Óscar Washington Tabárez, le dio todo su apoyo y le dijo que siguiera haciendo en el partido lo mismo que ha hecho en su club y en los entrenamientos previos en la selección.
EFE.