El primer cara a cara electoral entre dos candidatos a la Presidencia de Uruguay en 25 años, celebrado este martes entre el aspirante oficialista, Daniel Martínez, y el opositor Luis Lacalle Pou, finalizó en empate después de que ambos expusieran las líneas básicas de sus programas.
En una puesta en escena en la que nada quedó a la improvisación y en la que no hubo auténtico debate, sino exposición de cada uno, réplica y contrarréplica, los principales favoritos en las encuestas para dominar los comicios del 27 de octubre y definir la Presidencia en una segunda vuelta, el 24 de noviembre, hablaron sobre Economía, Seguridad Humana y Convivencia, Desarrollo Humano y Futuro.
Uruguay no vivía un cara a cara entre dos candidatos desde 1994, cuando se enfrentaron Tabaré Vázquez (hoy presidente del Gobierno) por el Frente Amplio y Juan Andrés Ramírez por el Partido Nacional, apenas semanas después de que lo hicieran Vázquez y Julio María Sanguinetti (Partido Colorado), que terminó ganando los comicios.
Sí hubo ocasiones con paneles a los que acudieron varios aspirantes o bien encuentros entre candidatos antes de las internas, como sucedió para las celebradas en junio pasado.
Este cara a cara, pactado hasta el milímetro por los comandos de campaña del Frente Amplio, que gobierna Uruguay desde 2005, y el Partido Nacional (PN), del que Lacalle Pou fue candidato en segunda vuelta en 2015, no estuvo exento de polémica ante la ausencia del candidato del Partido Colorado (PC), Ernesto Talvi.
El economista, que derrotó en las internas del PC al dos veces mandatario de Uruguay Sanguinetti, es tercero en las encuestas de intención de voto, por lo que se quejó por no estar presente en el «debate presidencial».
Tampoco fue considerado para esta instancia el cuarto aspirante, el exmilitar Guido Manini Ríos, candidato de Cabildo Abierto, pese a que cada sondeo le acerca más a Talvi.
En ese marco, Martínez y Lacalle Pou comparecieron en los estudios de Canal 4, aunque con emisión en cadena nacional, para mostrar su fuerza con vistas a una segunda vuelta casi asegurada para ambos.
El ingeniero y candidato oficialista defendió los logros del Frente Amplio durante los 15 años de Gobierno (2005-2020) en aspectos como reducción de la pobreza (del 40 % al 9 %) o el cambio de la matriz energética en favor de las renovables.
Su oponente basó su argumentación en atacar la gestión de los sucesivos Gobiernos de Tabaré Vázquez (2005-2010 y 2015-2020) y José Mujica (2010-2015), especialmente en materia de seguridad.
En Economía, uno de los asuntos cruciales de la campaña, Martínez dijo que las medidas propuestas por Lacalle le recuerdan al «desastre» de la gestión de Mauricio Macri en Argentina.
«(Macri) pintaba todo fácil y lamentablemente ya sabemos lo que pasó, que la verdad fue un desastre. Me gustaría saber cuáles son las propuestas en concreto, dónde está alineada la propuesta de Gobierno», enfatizó Martínez.
Por su parte, Lacalle Pou consideró que el FA «incumplió promesas» y eso hace que no sea creíble.
«Hicieron campaña de 2014 diciendo que no iba a haber impuestos, sucedió todo lo contrario», destacó.
Sin embargo, ninguno se refirió a los altos precios en la vida cotidiana ni al comercio exterior de Uruguay ni al acuerdo entre la Unión Europea y el Mercado Común del Sur (Mercosur).
En materia de medioambiente, ante la propuesta de Lacalle Pou de crear un Ministerio ‘ad hoc’, Martínez respondió con la apertura de un Ministerio de Ambiente y Transición Sustentable para tratar la cuestión de manera moderna «como España y Francia».
El opositor calificó el deterioro del agua en los últimos años como «muy grave», por lo que pidió aumentar la inversión en investigación.
Ni las relaciones internacionales ni la igualdad de género formaron parte del cara a cara. Solo Martínez aludió a la creación de un Gobierno paritario y a las tobilleras para los maltratadores en la lucha contra la violencia machista.
En el denominado «minuto de oro» con el que cada uno cerró su intervención, Martínez reclamó el voto a los jóvenes, a los que, dijo, «les ha tocado vivir un Uruguay muy distinto al de sus padres» y para evitar un retroceso «en los logros» del país, mientras que Lacalle Pou pidió «una alternancia» y asumió «el desafío del momento», pese a que la situación actual es «compleja».
Uruguay está llamado a las urnas para sus elecciones presidenciales el 27 de octubre. Si un candidato no obtiene más del 50 % de los votos, habrá una segunda vuelta el 24 de noviembre. El ganador de esta relevaría el 1 de marzo de 2020 a Tabaré Vázquez como mandatario del país suramericano.
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