Base Científica Antártica Artigas (Isla Rey Jorge), 23 ene (EFE).- La helada mañana antártica, cubierta por una neblina que hacía casi imposible ver más allá de algunos metros hacia el horizonte y cubría por completo el Glaciar Collins no impidió a la presidenta de Estonia, Kersti Kaljulaid, visitar el continente frío y detenerse en la Base Científica Antártica Artigas de Uruguay.
Tras un cálido recibimiento por parte de la dotación uruguaya que, en pocos minutos, hizo que todos los visitantes se olvidasen del frío, uruguayos y estonios compartieron un desayuno de bienvenida con típicos productos uruguayos.
«Oh, eso es dulce de leche» fueron algunas de las pocas palabras en español que salieron de la boca de la mandataria cuando vio los potes llenos de este dulce rioplatense que fue servido para acompañar las tortas fritas.
La visita de la delegación del país europeo se da en el marco de las celebraciones por el 200 aniversario de la llegada a la Antártida de Fabian Bellingshausen, nacido en la Isla Saaremaa (hoy Estonia) en 1778.
Hace 200 años, la expedición de la Marina Imperial Rusa, ordenada por el zar Alejandro I y comandada por Bellingshausen, fue la primera en dejar constancia documental del avistamiento del continente antártico.
«Estamos aquí porque la Antártida ha sido descubierta hace 200 años por el almirante Bellingshausen, como todos saben. Trabajó con un barco ruso, por supuesto, pero él vino de Estonia, es de allí, creció en nuestro país, y entonces nosotros organizamos este viaje en un bote desde Estonia hasta Antártida», dijo a Efe la presidenta después del recorrido por las instalaciones de la base uruguaya.
El hecho de que una figura de la talla de Bellingshausen pertenezca a Estonia es «un orgullo» para ellos y, por lo tanto, intentan celebrar esto con visitas a las diferentes bases antárticas y compartiendo buenos momentos con personas de otros países para resaltar la importancia de la relación multilateral que busca el Tratado Antártico.
Asimismo, Kaljulaid afirmó que están «muy atentos» a los problemas que nuestro planeta está afrontando ya que hace dos siglos no estaban la industrialización, la contaminación, el cambio climático ni todas aquellos obstáculos que hoy se busca combatir y superar.
«Este viaje es una celebración de la historia y del futuro acerca de salvar el planeta de todos los seres, animales, humanos y el ecosistema que es tan importante como todos sabemos», acotó.
Además de las relaciones diplomáticas, de la curiosidad por las tradiciones y del buen comer que ofrecieron los uruguayos, Kaljulaid mostró su interés por las investigaciones científicas que se llevan a cabo en la base Artigas.
Por ello, consultó a la dotación cuáles eran los proyectos que se hacían en la Misión 2020 y pidió conocer el laboratorio en el que los científicos uruguayos trabajan.
La mandataria también recorrió el Aula de Interpretación de Naturaleza en la Antártica (AINA), sitio en el que duerme la dotación y cuya fachada está pintada por un inmenso sol como el que flamea en la bandera uruguaya.
La presidenta celebró que en el continente helado todos cooperan sin discutir acerca de cómo manejar la Antártida y afirmó que es «muy importante».
«Esto muestra que si nosotros realmente lo queremos podemos trabajar juntos y hacer de nuestro planeta un mejor lugar», concluyó.
Después del desayuno, de visitar las diferentes instalaciones y de intercambiar regalos de unos a otros, todos compartieron una foto juntos en la costa de la Base Artigas y junto a las banderas de Estonia, Uruguay, Colombia y Perú.
Este jueves iba a ser el último día en el que los científicos uruguayos, junto a dos periodistas que Efe tiene desplazados allá tras ganar una convocatoria del Instituto Antártico Uruguayo para difundir la Misión 2020, iban a estar en la Isla Rey Jorge, sin embargo, la persistente niebla hizo que la partida se atrase un día más.