Apostar a la innovación y la agilidad en el sistema financiero es uno de los principales desafíos que el Banco Central del Uruguay (BCU) asume con vistas a 2025 como parte de una agenda de cambios que buscan impulsar la digitalización y promover la llegada de nuevos inversores.
Así lo afirmó a Efe este miércoles el presidente del BCU, Diego Labat, en el marco de su disertación en un conversatorio organizado por la Cámara Oficial Española de Comercio, Industria y Navegación de Uruguay (Camacoes).
Labat, que asumió su cargo el pasado 20 de marzo, una semana después de que fuese declarada la emergencia sanitaria por la covid-19 en Uruguay, aseguró con motivo de su charla, titulada «Un sistema financiero sólido, innovador y accesible», que el BCU ya ha comenzado a impulsar su nuevo plan para los próximos cinco años.
El presidente del BCU apuntó que el país ya cuenta con un sistema financiero «muy sólido», que dio a la nueva administración un buen punto de partida, y agregó que se pondrá el foco en incorporar más innovación al sistema.
«Lo que queremos es una agenda muy fuerte de innovación, con un sistema financiero que se agilice y promover que aparezcan nuevos jugadores, inversores que quieran participar y aumentar la infraestructura que hoy tenemos», recalcó.
A eso agregó que, si bien Uruguay ya cuenta con una normativa que facilita la llegada de inversiones extranjeras, el buen manejo que el país ha tenido durante la crisis sanitaria puede ayudar.
«En un mundo complicado, es un muy buen indicador a la hora del ambiente de negocios mostrar que Uruguay hace las cosas bien y a partir de ahí construir para que vengan nuevos emprendimientos», puntualizó.
Labat, que se ha desempeñado como director en la banca privada y en la petrolera estatal ANCAP, dijo a su vez que con vistas al futuro el país incorporará a su sistema de pagos productos que aún no tiene y avanzará, mediante cambios en la legislación, hacia un manejo de cheques de forma electrónica.
El presidente del BCU destacó asimismo durante su presentación que otra de las líneas de trabajo consiste en dar un nuevo marco a la política monetaria, algo que ya viene concretando con «pequeños cambios» y que tiene como fin que el país alcance una inflación adecuada a niveles internacionales.
Por su parte, la nueva consejera económica y comercial de la embajada de España en Uruguay, Paz Quesada, que acaba de llegar al país e intervino en la presentación de la charla junto al embajador, José Javier Gómez-Llera y García-Nava, y el presidente de Camacoes, José Pedro Derrégibus, se mostró entusiasmada por la charla.
«Están llegando muchas empresas a Uruguay atraídas por la estabilidad, por la seguridad jurídica, y en las últimas semanas han desembarcado nuevas empresas españolas, con lo cual yo creo que siempre podemos incrementar la inversión y encontrar en Uruguay un socio todavía mayor», opinó.
EFE
Comentarios