América debe aprovechar la transformación tecnológica para impulsar el crecimiento de la agricultura y el desarrollo de las zonas rurales de la mano de la protección del medio ambiente, afirmó este lunes el director general del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), Manuel Otero.
«Estamos en una época de cambios acelerados que demandan respuestas acordes. Nuestra principal preocupación es asegurar las condiciones institucionales para que América Latina y el Caribe aproveche a pleno el potencial de transformación que ofrecen los nuevos escenarios de la ciencia y le tecnología», dijo Otero en una reunión del consejo directivo del Fondo Regional de Tecnología Agropecuaria (Fontagro).
Otero remarcó la importancia de apoyar la transformación del sector agropecuario de Latinoamérica y el Caribe, colocando los temas de ciencia y tecnología como claves en las agendas públicas y privadas.
«Hay áreas como la biotecnología y la agricultura digital que requieren estrategias diferenciadas y estamos actuando en ese sentido, de modo de establecer un mecanismo para facilitar el acceso de los países de menos recursos a estas tecnologías», agregó Otero.
El director del IICA citó como ejemplo la alianza del instituto con la organización PAD, fundada por el Premio Nobel de Economía, Michael Kremer, que tiene como objetivo llevar asistencia vía telefonía celular a productores familiares.
Además, resaltó la interacción del IICA con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Microsoft para una agenda pro-conectividad.
Otero también mencionó a la bioeconomía como «un camino promisorio» para la región, ya que ofrece la posibilidad de ampliar los alcances de la agricultura y la ruralidad.
En el contexto actual de la pandemia de la covid-19, que ha acrecentado los retos de la región para el impulso de la agricultura, Otero dijo que se requieren mayores alianzas y contribuciones institucionales, con el objetivo de conformar una plataforma de respaldo al sector agropecuario.
En la reunión del Fontagro, el director del IICA destacó la voluntad del instituto para colaborar con los países y servir como puente hacia el desarrollo de iniciativas tecnológicas.
El Fontagro, creado en 1998 para la innovación y la seguridad alimentaria, está compuesto por Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, España, Honduras, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela, y es patrocinado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el IICA.
EFE