La Coordinadora Pirotecnia Cero Uy se conforma en diciembre de 2020
por varias organizaciones de la sociedad civil con el fin de trabajar en conjunto
y lograr cambios en la sensibilidad y conciencia de la población sobre las
consecuencias negativas del uso de la pirotecnia. A su vez, también trabaja
para seguir avanzando por las vías legales y que el uso de pirotecnia a modo
de festejo en diferentes ambientes comience a desaparecer en nuestro país.
El uso de pirotecnia tiene repercusiones negativas tanto en la salud
humana como también en el bienestar animal y en el medio ambiente. Desde
hace un tiempo está instalado el concepto de “una sola salud” que justamente
habla de la vinculación de la salud humana, animal y ambiental. Es necesario
entender que lo que afecta a una, terminará afectando a las demás.
Entendiendo este concepto y abarcando así todas las áreas implicadas,
dicha coordinadora está integrada por personas y organizaciones vinculadas a
la salud humana, la discapacidad, la protección animal y la protección
ambiental.
FUNDAMENTACIÓN
Cuando hablamos de fuegos artificiales, nos referimos a todo dispositivo
pirotécnico que tenga efecto visual, sonoro y/o fumígeno.
POR LAS PERSONAS
El uso de fuegos artificiales no solo significa un peligro físico para
quien lo manipule, sino algo que también genera sufrimiento y alteraciones en
el comportamiento a terceros; vulnerando así los derechos de las demás
personas tras la excusa de defender la libertad de festejo de otros.
En relación al impacto sobre la salud humana la manipulación y uso
inadecuado de la pirotecnia acarrea cada año que muchas personas,
incluidos niños y niñas, sean atendidos de emergencia en los hospitales por
mutilaciones, fracturas y luxaciones, heridas, lesiones oculares con perforación y
penetración de cuerpos extraños, hipoacusia por perforación del tímpano y
quemaduras de diversa consideración. Además de este tipo de accidentes hay
múltiples personas – en particular bebés, ancianos y personas convalecientes –
que soportan con incomodidad y malestar el ruido ensordecedor de la
pirotecnia y la contaminación acústica.
En particular, las personas con discapacidades e hipersensibilidad
sensorial, como en el caso de las personas con CEA (Condición del Espectro
Autista), sufren las consecuencias de la molesta pirotecnia, causándoles,
miedo, estrés, palpitaciones, taquicardia, afectación del sistema inmunitario y,
en caso de enfermedad, empeoramiento de la salud del paciente.
“La pirotecnia afecta especialmente a los niños con condición del
espectro autista, que tienen una hipersensibilidad a los sonidos en general. Esto
tiene que ver con unas conexiones entre la amígdala y la corteza cerebral que
están disfuncionadas y esto hace que frente a mínimas cuestiones sonoras,
estos niños las perciban y reaccionen”
Hay cientos de testimonios de familias que en los días festivos, buscan
alejarse de los lugares de mayor uso de pirotecnia sonora y pasan horas
encerrados en una habitación de la casa, escondiéndose hasta en el baño en
búsqueda de un lugar que reduzca los estruendos, debido a que no pueden
comprender de donde proviene el mismo y su significado.
El ruido de los fuegos artificiales es un sonido sumamente intenso y
muchas personas lo perciben de manera muy vívida. Sienten como si
estuvieran en el medio de un bombardeo en una guerra, como si cayeran
bombas al lado de ellos. Esto genera muchísimo estrés, muchísima liberación de
los neurotransmisores propios del estrés y genera un gran nivel de alteración
conductual y emocional. Por otro lado, al ser totalmente impredecibles, es algo
frente a lo cual no se pueden preparar y lo viven con muchísima angustia.
El uso de la pirotecnia genera un alto nivel de ansiedad y estrés, crisis y
episodios de tensión, angustia, llantos y gritos hasta llegar a autolesionarse o
presentar convulsiones en una gran parte de la población. Cuando algo hace
sufrir al otro, deja de ser divertido.
POR LOS ANIMALES
El oído de muchos animales es considerablemente más sensible que el
humano, por lo que las explosiones de fuegos artificiales no solo les resultan más
perturbadoras, sino que les pueden dañar más gravemente su capacidad
auditiva.
Los ruidos causados por la pirotecnia pueden provocar una pérdida de
audición y tinnitus (fenómeno consistente en percibir golpes o sonidos en el
oído que no provienen de una fuente externa, es decir, oír ruidos que no se
corresponden con ningún sonido externo).
Además de estos daños físicos, los ruidos causados por la pirotecnia
causan también daño psicológico al provocar miedo, ansiedad y angustia. De
hecho, los ruidos causados por la pirotecnia pueden llegar a generar fobias en
los animales, al aumentar las reacciones de pánico a los ruidos fuertes con la
exposición repetida a estos. Se estima que la quinta parte de desapariciones
de animales de familia se deben a sonidos muy fuertes, principalmente fuegos
artificiales y tormentas.
Un lugar donde los efectos de la pirotecnia en los animales pueden
comprobarse de manera muy clara son en los refugios y protectoras donde los
animales son numerosos y en ocasiones donde se usa la pirotecnia, se debe
tener especial cuidado con la población ya que provoca que los animales se
pongan más nerviosos, se peleen entre sí, se escapen y en algunos casos hay
que recurrir a la medicación.
Los perros son capaces de oír hasta los 60.000hz, mientras que los
humanos no oyen nada a partir de 20.000hz, lo cual supone solamente un
tercio de la capacidad de los primeros. Esta agudeza auditiva de los perros es
una de las causas que provocan que el sonido de la pirotecnia sea una
experiencia negativa para ellos. Estos animales muestran señales de ansiedad y
agobio que se intensifican a medida que se ven incapaces de escapar del
sonido. Las reacciones a los fuegos artificiales que con más frecuencia se
pueden observar en un perro son el congelamiento o paralización, los intentos
incontrolados de escapar y esconderse, y los temblores. También se pueden
presentar otros signos más intensos, como salivación, taquicardia,
vocalizaciones intensas, micción o defecación, actividad aumentada, estado
de alerta y trastornos gastrointestinales, entre otros.
Los efectos de la pirotecnia en los gatos son menos evidentes, pero sus
respuestas son similares a las de los perros, como intentar esconderse o
escaparse. Sin embargo, al margen del miedo que pasan, tienen un riesgo
mayor de intoxicación por esta causa. Su curiosidad hace que muchos de los
gatos que se encuentran cerca de zonas donde se realizan, los ingieran. En
algunos casos, llegan a perder la vista o se lesionan gravemente, si se ven
afectados por las explosiones.
Los caballos pueden sentirse fácilmente amenazados por los fuegos
artificiales por su condición de animales herbívoros, potenciales víctimas de
otros animales, dado que están en estado de alerta constantemente a causa
de posibles depredadores. En ocasiones pueden reaccionar a la pirotecnia
tratando de saltar vallados y huir peligrosamente hacia zonas donde pueden
ser atropellados. Recordamos que en nuestras ciudades debido a la tracción a
sangre, existen cientos de equinos circulando por las calles.
El ruido de los fuegos artificiales puede causar taquicardia e incluso la
muerte a las aves. Una muestra del estrés que les provocan se refleja en que
pueden causar el abandono temporal o permanente del lugar donde se
encuentran. Las playas costeras de Uruguay sirven a varias especies de aves
para nidificar, así como también muchas aves migratorias las visitan en
diferentes épocas del año. El uso de pirotecnia en la zona provoca el
abandono temprano o definitivo de las aves del lugar, exponiendo a sus
huevos o pichones quedando totalmente expuestos a los
depredadores e inclemencias climáticas.
Las respuestas de desorientación y pánico frente a los fuegos artificiales
pueden provocar que las aves se estallen contra los edificios o vuelen hacia el
mar. Eso ocurre porque, al huir de los sonidos, muchas aves no saben cómo
volver a sus nidos una vez que el ruido termina, lo que provoca que muchas de
sus crías queden desamparadas.
Cuando hablamos de convivencia responsable nos referimos a convivir
con armonía y respeto con el resto de las especies con quienes compartimos el
planeta; el uso de la pirotecnia sin dudas es un gran factor a tomar en cuenta.
POR EL MEDIO AMBIENTE
Poco se habla del efecto que tiene la pirotecnia sobre la fauna
silvestre y el ambiente natural. Son muchos los efectos negativos de este
“festejo bélico» sobre el medio ambiente natural.
Los artefactos pirotécnicos incluyen mucho más que pólvora. Son
varios los compuestos químicos necesarios para obtener los distintos efectos y
colores: bario para los tonos verdes, estroncio para los rojos, sodio para los
dorados, aluminio para chispas plateadas y blancas, antimonio para los
destellos. También algunos estudios han alertado sobre el uso de perclorato
de potasio y/o de amonio como oxidantes.
Muchos son los estudios científicos que informan y advierten sobre
la contaminación provocada por el uso de fuegos artificiales. Aumento
significativo de las trazas de metales en el aire y en algunas ocasiones de
contaminantes altamente tóxicos como dioxinas y furanos policlorados.
También los cuerpos de agua se ven afectados por el aumento en
la concentración de sustancias como el perclorato(que puede multiplicar su
presencia por mil según un estudio en EEUU).
El suelo, el menos estudiado ante la pirotecnia, también ha
mostrado impactos en el aumento de perclorato. Pero sin leer un tedioso
informe científico solo basta con usar nuestro sentido del olfato para reportar
la polución que genera esa mixtura de nitratos, sulfatos y percloratos
en fórmulas de sodio, cobre, estroncio, litio, antimonio, magnesio y
aluminio, sin olvidar el bario, de isótopos radiactivos, que nos ofrece el color
verde.
Los fuegos artificiales son técnicamente reconocidos como fuente
potencial de incendios forestales. Una vez lanzados, sus partes y restos
(elementos de propulsión, componentes en proceso de ignición, componentes
con alta temperatura) pueden caer en zonas intraurbanas y periurbanas que
tienen vegetación seca y que pueden por lo tanto entrar en combustión. La
realización de fuegos artificiales durante noches con viento aumenta aun mas
el radio de riesgo. Esto puede considerarse, eventualmente, como una de las
causas de incendio de pastizales, arbustales y bosques tanto dentro de
ciudades y pueblos como en ambientes ubicados fuera de ellos.
Ampliando, en la pirotecnia se mezclan neutralizantes, oxidantes y
aglomerantes, además del perclorato de sodio que da propulsión al
cohete, los metales pesados que aportan el color y los aerosoles que
producen la detonación. Por ejemplo, se utiliza el estroncio para conseguir
los tonos rojos, el bario para los verdes, el sodio para los dorados, el
aluminio para las chispas blancas y plateadas y el antimonio para los
destellos. Y para no quedarnos solo en su uso, algunos investigadores
sostienen que la mayor contaminación química no están en el estallido (si
se da correctamente), sino durante la producción del material pirotécnico.
Reconociendo que el ambiente tiene que ver con todo y está
presente en cada acción humana las consideraciones ambientales deben
estar presentes explícitamente, en todas las actividades y en cada campo
de actuación de las entidades públicas y privadas, particularmente como
parte obligatoria e indisoluble de la toma de decisiones; por lo tanto, lo
ambiental no deberá ser considerado en ningún caso como un sector
independiente y separado de las consideraciones sociales, económicas,
políticas, culturales y en general, de cualquier orden.
Atendiendo a lo que establece nuestra Constitución En el art 47: “La
protección del medio ambiente es de interés general. Las personas
deberán abstenerse de cualquier acto que cause depredación,
destrucción o contaminación graves al medio ambiente”, y considerando que
desde el 2017 existe un proyecto de ley al respecto, exhortamos al Poder
Legislativos proceder con la prohibición al uso de pirotecnia en nuestro país.
Ante todos los motivos expuestos, desde la Coordinadora Pirotecnia Cero
UY seguimos apostando a educar y fomentar una sociedad más responsable y
empática; donde se respete y proteja los derechos de las personas, de los
animales y el cuidado del medio ambiente por igual.
COORDINADORA PIROTECNIA CERO UY