Mientras se llevan a cabo obras en determinados centros y se suman nuevos equipos y más personal, se espera que a finales de mes la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) cuente con 205 camas en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) o Centros de Tratamiento Intensivo (CTI), como se les denomina en Uruguay, explicó su gerente general, Eduardo Henderson.
«Nosotros, cuando hablamos de camas de CTI, manejamos tres criterios: camas propias en hospitales de ASSE, algunos convenios en los cuales reservamos de forma permanente determinado número de camas y luego, que es lo más caro para nosotros, es cuando no tenemos más remedio que salir a comprar camas de CTI», expresó.
Henderson indicó que, cuando la nueva dirección -encabezada por Leonardo Cipriani- asumió el cargo en marzo de 2020, había 112 camas en cuidados intensivos y, en la actualidad, hay una dotación de 150, y agregó que incluso hay departamentos (provincias) del país sin ese tipo de plazas en hospitales públicos, aunque sí en privados.
El gerente general puntualizó que hoy ASSE tiene el 59 % de las camas ocupadas.
Henderson subrayó que para armar una cama de CTI «tiene que haber» recursos humanos especializados, pero destacó que, durante la pandemia, la Sociedad Uruguaya de Medicina Intensiva acepta que otros profesionales, que no son intensivistas, puedan trabajar cumpliendo sus funciones.
«Son médicos residentes de cuidados intensivos (tienen formación pero aún no el título), pero que estén en una unidad que haya por lo menos un coordinador que sea intensivista, tienen la supervisión permanente. Otro caso es especialidades que son cercanas como los anestesistas», afirmó.
Con un acumulado de 23.048 casos positivos de coronavirus desde que el 13 de marzo se declarara la emergencia sanitaria y 6.287 activos, actualmente en el país hay 72 personas en cuidados intensivos, 54 en centros privados y 18 en públicos.
Así lo explicó este miércoles a la prensa Cipriani, quien remarcó que, en este momento, hay capacidad para atender a todos los pacientes que ingresan tanto por covid-19 como por otras dolencias.
«Nosotros tenemos buena capacidad de CTI. Todo este tiempo de la pandemia nos permitió prepararnos para esto y transmitir tranquilidad a la gente que tenemos buen colchón de camas. Ojalá que nunca se usen, pero en realidad pudimos conseguir el equipamiento y, más importante, el personal», puntualizó.
Este martes, un correo electrónico enviado desde el Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME) difundido en redes sociales informaba de que «de forma transitoria y hasta nuevo aviso» dos centros de salud pública de Montevideo no podían recibir pacientes positivos o sospechosos de covid-19 por saturación.
Sin embargo, Cipriani dijo que el comunicado no era correcto y resaltó que el problema fue puntual.
EFE