Por Concepción M. Moreno
La lluvia cubrió este lunes el Barrio Sur de Montevideo para despedir a uno de sus pobladores más ilustres, Waldemar ‘Cachila’ Silva, referente del candombe, fallecido anoche a causa de complicaciones en su estado de salud por la covid-19.
Silva, de 73 años, era el creador y alma de la comparsa C1080, una de las más importantes del candombe -género musical afrouruguayo caracterizado por sus cuerdas (grupos) de tambores-, e hilo conductor de una familia dedicada a mantener esa expresión cultural integrada en el carnaval montevideano.
Hijo del legendario Juan Ángel ‘Cacique’ Silva, creador de la comparsa Morenada -una de las más famosas del siglo XX-, fundó junto a su esposa, Margarita Barrios, la C1080 como una continuación de aquella y como legado para sus hijos y nietos, que, de hecho, siguen la tradición.
Poco antes de su entierro en el Cementerio del Buceo de la capital uruguaya, los restos de Silva visitaron por última vez ‘sus’ calles, aquellas en las que nació, creció, desfiló con los tambores y formó una familia que continúa su labor.
Pese a la desapacible mañana, vecinos del Barrio Sur se acercaron a dar su último adiós a ‘Cachila’ hasta el antiguo conventillo «Medio Mundo», típico inmueble de inquilinato que albergaba a muchísimas familias montevideanas de raza negra e inmigrantes en el siglo pasado, que su abuela, primero, y luego su padre regentaron.
Allí un grupo de tambores esperó el paso del cortejo fúnebre y lo acompañó por las calles del barrio en medio de un respetuoso silencio solo roto por el toque de los cueros y las maderas.
HISTORIA Y CULTURA
Hombre de arraigadas tradiciones, consideraba el candombe y todo lo que rodeaba a la comparsa durante el año -no sólo en el momento cumbre del desfile de Llamadas, en la época de carnaval- su vida; tanto que era otro empleo más, que alternó con labores técnicas, como la de «funcionario administrativo en el área de imprenta» que desempeñó en la Asociación Latinoamericana de Integración desde 1993 hasta su jubilación, confirmaron a Efe fuentes de Aladi.
En el documental «Cachila», que Sebastián Bednarik hizo en 2008 sobre su figura, el propio Silva defendía que «la cultura va a existir toda la vida» y la vinculaba a la historia de los pueblos, en este caso el afrouruguayo.
«Lo que mi viejo decía es, en lo que es el conjunto, tiene que ser una cosa de ley. Yo trato de mantener eso para que ellos también lo sigan, por supuesto, porque la cultura no es una cosa que exista hoy y mañana va a dejar de existir», afirmaba en la cinta en relación a la tradición familiar.
También en la grabación, ‘Cachila’ reconocía que no quería «tocarle el trono» a su padre y que, por eso, le pidió «autorización» cuando quiso emprender el sueño de fundar otra comparsa con su compañera, la hoy C1080 (por la dirección Cuareim 1080, donde se radicaba el conventillo Medio Mundo), que nació en 1999.
«Mi casa era una comparsa», llega a decir ‘Cachila’ en la cinta.
LOS ADIOSES
Una figura emblemática de la cultura uruguaya y vinculada a la comparsa C1080, el reconocido músico Hugo Fattoruso, expresaba este lunes a Efe su «profunda tristeza por esta partida», al tiempo que dedicaba un «cariño infinito hasta el fin de los días» a su familia.
Tanto el Movimiento Afro Nacionalista (vinculado al Partido Nacional, el del presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou) como DAECPU (Directores Asociados de Espectáculos Carnavalescos Populares del Uruguay) confirmaron, el domingo por la noche, la muerte de Silva.
El colectivo carnavalero lo calificó en su web de «figura central» del candombe «desde hace seis décadas» y dijo que «representa el sentimiento candombero del Barrio Sur, del Conventillo del Medio Mundo en el que nació y la cultura uruguaya».
Figuras del ámbito de la cultura, e incluso de la política, como el expresidente de Uruguay Julio María Sanguinetti, quien se mostró «profundamente» conmovido por el fallecimiento de su «entrañable amigo», expresaron su dolor por la desaparición de Silva.
También el músico y productor Juan Campodónico calificó a ‘Cachila’ de «parte de esa tradición de la música afrouruguaya» en declaraciones a Efe, después de haber publicado en Twitter: «Tuvimos la suerte de tener a Cuareim 1080 abriendo nuestro último álbum».
El cofundador del grupo rioplatense Bajofondo aludía así a la grabación del tema «Solari Yacumenza», con el que se abre su último álbum, «Aura» (2019), y que incluye un acompañamiento de tambores tocados no por Silva pero sí por sus hijos.
Un Grammy -si ese trabajo es premiado como mejor álbum rock o alternativo en marzo- podría ser el último gran homenaje póstumo a la figura de ‘Cachila’, quien ya fue premiado en vida en varias ocasiones y despedido en esta mañana gris por ‘su’ Barrio Sur.
EFE