La Comisión del Bicentenario hizo pública hoy la carta que envió a la Senadora Lucía Topolansky y la respuesta de esta, debido a un pedido telefónico que realizó en su momento la Ministra Liliam Kechichián pidiendo que la organización se disculpara públicamente por un acto fallido en el protocolo.
Estas son las cartas:
Carmelo, 24 de febrero de 2016
Senadora de la República Oriental del Uruguay,
Senadora Señora Lucía Topolansky
Presente.
Motiva la presente una llamada recibida en el Municipio de Carmelo la cual fuera realizada por la Ministra de Turismo Sra. Liliam Kechichián, comunicándonos que Usted se había sentido molesta u ofendida, por no haber sido considerada como la más alta autoridad presente en los actos centrales del Bicentenario de la ciudad de Carmelo, realizados el pasado 12 de febrero. Y solicitándonos, la jerarca referida, una carta dirigida a Usted donde le pidiéramos las disculpas del caso.
Queremos expresarle que somos una Comisión, que viene trabajando desde hace casi tres años con la finalidad de organizar los festejos del Bicentenario de nuestra ciudad, la cual esta integrada por vecinos; gente común, del llano, que no conoce, ni tiene por qué conocer, de cargos, jerarquías o títulos. Por lo cual no supo que Usted era la máxima autoridad durante estas celebraciones.
En lo que refiere al acto central, con 24 horas de antelación, el Presidente de la República Dr. Tabaré Vázquez confirmó su no asistencia mediante nota, no expresando en la misma a quien se designaba en su representación.
Tampoco, de forma oficial, recibimos confirmación de la asistencia o no por parte del Vicepresidente de la República Sr. Raúl Sendic.
La única confirmación de asistencia que recibimos de forma oficial fue la presencia de la Ministra de Turismo. A la cual la comisión invitó para que en representación del Poder Ejecutivo hiciera uso de la palabra, la cual no realizó cediendo esa distinción al Ministro de Transporte y Obras Públicas, Sr. Víctor Rossi, que con su presencia también acompañó estos actos.
Quien debió informar a los integrantes de esta Comisión, como al Ministerio de Defensa de Vuestra presencia y del cargo que detentaba debió ser la Vicepresidencia de la República. Para que de esa forma el Comandante del dispositivo del desfile militar le solicitara a Usted la autorización para dar inicio al desfile militar y no al Intendente de Colonia, como a la postre se hizo.
Entendemos y comprendemos si esto provocó en Usted malestar, pero en base a lo expuesto anteriormente, consideramos que no podemos hacernos cargo de las omisiones y descoordinaciones que implicaron tal situación ya que no fuimos debidamente informados por las reparticiones competentes.
Sí, creemos pertinente hacerle llegar estas líneas planteándole como se dieron los hechos, porque en definitiva cuando cualquiera de los integrantes de esta Comisión invitan a alguien a quien aprecian a su casa, con motivo de algún festejo, lo que siempre se busca es que esa persona pase bien y se sienta a gusto. Aprovechamos la presente para agradecer Vuestra presencia ya que la misma terminó de jerarquizar este acontecimiento histórico; que nuestro pueblo vivió como una verdadera fiesta, donde primó la tolerancia, la alegría y la paz.
Desde ya, y esperando que con la presente hayan quedado claras todas las circunstancias vividas, la saludamos afectuosamente.
(siguen firmas)
La respuesta de la Senadora Lucía Topolansky
Estimados señores miembros de la Comisión Coordinadora del Bicentenario de Carmelo:
Agradezco vuestra carta del 24 de febrero de 2016. En ningún momento me sentí molesta por la situación creada. No tenía la Comisión, como saber que yo estaba en el ejercicio de la Vicepresidencia.
Lo mismo le ocurrió al militar que pidió permiso para la realización del desfile. En todo caso fue una omisión mía no haber informado a las organizaciones o al servicio de protocolo de mi presencia en esas condiciones.
Junto con el senador Mujica, cuya familia materna, como ustedes saben, es oriunda de Carmelo, quisimos acompañar esta celebración tan importante para dicha ciudad y lo hicimos con mucho gusto.
En realidad, el resto pasa a un detalle formal porque lo más importante ese día fue la alegría y la participación multitudinaria de esa querida ciudad.
De todos modos agradezco la nota recibida, y de verdad, pasamos muy bien y valió la pena estar allí a pesar de enorme calor de ese día.
Fraternalmente,
Lucía Topolansky