Por Santiago Carbone
El personal de salud dio un fuerte ejemplo de compromiso a la población al vacunarse de manera masiva contra la covid-19 en su primer día disponible para dejar en claro que, la salida a la pandemia, es a través de la inoculación.
Con el arribo de las primeras 50.000 dosis del laboratorio estadounidense Pfizer, más de 20.000 trabajadores de la salud mostraron su compromiso al agotar los primeros cupos disponibles y se sumarán a las 170.000 personas que anteriormente recibieron la primera dosis de la vacuna CoronaVac del laboratorio chino Sinovac.
El presidente del Sindicato Médico del Uruguay, Gustavo Grecco, dijo a Efe que esa organización está «profundamente comprometida» en convocar a la población y al personal de la salud a vacunarse.
Además, valoró como «positiva» esta jornada y aseguró que la respuesta de los sanitarios agotando la agenda fue «un claro mensaje» del compromiso que tienen con la vacunación.
Uno de los vacunados de la jornada fue Daniel Montano, presidente del Sindicato Anestésico Quirúrgico, quien habló con la prensa tras recibir la primera dosis y destacó la rapidez y la buena organización del proceso.
Asimismo, subrayó la importancia de la inoculación contra la covid-19.
«Estamos convencidos que en este momento tan difícil de la pandemia la vacunación masiva es una de las armas que tenemos para poder disminuir la cantidad de virus circulante», concluyó.
En tanto, la Sociedad Uruguaya de Medicina Intensiva emitió un video en su cuenta de Twitter invitando a la gente a inocularse contra la covid-19.
«Me vacuno por mí, por vos, por todos», dice la pieza que agrega: «Los médicos intensivistas nos vacunamos, vacunate vos también!».
Esta mañana mientras se inoculaba a los sanitarios, quienes eran llamados de a uno y luego de recibir la dosis pasaban a un cuarto en el que debían aguardar 15 minutos por posibles reacciones adversas, la vacunadora Graciela Arambillete dijo a Efe que el proceso «comenzó muy bien» y con mucha coordinación.
También, resaltó la importancia de que los sanitarios se vacunen por ser los que están «en el primer puesto de batalla» y puntualizó que «cuanta más gente se vacune va a ser mejor».
Una de las vacunadas allí fue la psiquiatra Gabriela Dibarboure, quien en diálogo con Efe mostró su deseo de la inoculación se de «en forma muy masiva».
«Es la única manera de evitar que esta enfermedad, que parece en algunos casos muy banal, se convierta en un grave problema de salud con muchas muertes. Es de responsabilidad por uno y con el otro vacunarse», sentenció.
Las 50.000 dosis del laboratorio estadounidense llegaron a Uruguay el miércoles y, con ellas, el Gobierno de Luis Lacalle Pou pretende inocular a buena parte del personal sanitario, si bien los prioritarios son los trabajadores de cuidados intensivos, atención extrahospitalaria, urgencias y emergencias, unidades de internación hospitalaria y blocks quirúrgicos, así como a quienes efectúan los test de detección del coronavirus SARS-CoV-2.
La próxima semana está prevista la llegada de más de 1,5 millones de dosis del laboratorio chino Sinovac y hasta el 26 de abril se completarán 460.000 de Pfizer.
El Gobierno pretende que no haya «tiempo muerto», según dijo en febrero su presidente, Luis Lacalle Pou, entre las llegadas ya mencionadas y las que completen la compra hecha por Uruguay de 3,8 millones de dosis -entre los laboratorios chino y estadounidense- y la reserva de 1,5 millones de la plataforma Covax, creada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Uruguay batió este jueves su récord de contagios diarios de la covid-19 al registrar 1.238 nuevos casos y también el de personas que cursan la enfermedad, con 9.261 activos (de los que 102 están en cuidados intensivos).
Desde el 13 de marzo de 2020, cuando se declaró la emergencia sanitaria en Uruguay por la detección de los primeros positivos, el país suramericano registra 67.717 casos totales y 683 fallecidos.
EFE