De esta convocatoria del Gobierno participan más de 330 instituciones y organizaciones sociales para generar propuestas en procura de la implementación de una estrategia de desarrollo nacional.
“Hoy comenzaremos, como lo habíamos prometido, el proceso de pensar en conjunto, la sociedad civil y el Gobierno, al Uruguay del futuro”, sostuvo Vázquez al comienzo de su alocución.
Vázquez participó del bloque temático denominado Desarrollo e Inserción Internacional. Destinó la parte inicial de su intervención a detallar desde dónde viene el país, particularmente en referencia a los aspectos centrales de la historia económica del siglo XX y la salida de la dictadura (1973-1985).
Seguidamente, el mandatario enumeró lecciones que a su juicio Uruguay debería considerar al momento de planificar su inserción internacional. Señaló que la estrategia exportadora del país “debe ser siempre una estrategia que combine la integración regional con la diversificación de mercados”.
El mandatario indicó que se debe construir una matriz productiva cada vez más madura, es decir, cada vez más compleja, más diversificada, con valor agregado y productos con un alto contenido tecnológico.
Precisó que la intensidad tecnológica atraviesa “las viejas fronteras entre el sector primario” y debe incluir al secundario y el terciario de servicios.
A modo de ejemplo, sostuvo que la agricultura presenta una gran intensidad tecnológica, pero se debe avanzar en otros rubros de la producción nacional.
El Presidente señaló que, si bien la escala del país impone condiciones, también otorga oportunidades. “Para una país pequeño como Uruguay, la escala y la barrera demográfica imponen que sea imposible el crecimiento exclusivamente basado en el mercado interno y, mucho menos, el cierre de la economía detrás de muros de aranceles”. Vázquez subrayó que Uruguay ha generado capacidades tecnológicas en su aparato productivo orientadas a la producción de calidad para segmentos globales de consumidores, que son mucho mayores que el mercado interno del país.
Vázquez consideró que el proyecto nacional debe ser estratégico, de apertura en la economía combinada con la intervención estratégica del Estado para orientar la inversión y su calidad, no solo asegurando reglas estables y confianza, sino desarrollando mejoras de la calidad de gestión en las empresas públicas y de incentivos que premian la innovación en todos los sectores productivos.
“Es un proyecto orientado al mundo que busca construir autonomía nacional y reducir la subordinación desde una economía abierta con inclusión social y regulación pública inteligente y estratégica del Estado uruguayo”, expresó.
El Presidente enumeró los desafíos que afrontará el país y las preguntas que deberán considerar los participantes del Diálogo Social en materia de inserción internacional.
El Presidente enumeró los desafíos que afrontará el país y que deberán considerar los participantes del Diálogo Social en materia de inserción internacional. Según valoró, algunos de los puntos por discutir son los siguientes:
- ¿Cómo conjugar las diferentes dimensiones del desarrollo y cómo conjugar el desarrollo social y los desafíos que generan el cambio climático y la dimensión medioambiental en este modelo?
- ¿Uruguay está en condiciones de incrementar las inversiones amigables con el medioambiente en el marco de las actuales reglas comerciales y los actuales niveles de investigación y desarrollo?
- ¿Seguirá siendo Uruguay productor de alimentos cuando tenemos en el horizonte la producción de petróleo y gas?
- ¿Cómo profundizar la transformación de los sectores actualmente predominantes e intensivos en recursos naturales, incorporando innovaciones tecnológicas y escalando en las cadenas globales y regionales de valor?
- ¿Cómo diversificar la matriz exportadora y qué nuevos sectores pueden surgir que no dependan de rentas de recursos naturales?
- ¿Cómo atender los impactos sociales de una economía integrada a escala global y a escala regional?
- ¿Cómo las políticas educativas y tecnológicas pueden guiar la formación de recursos humanos calificados, para adecuarse a la demanda de empleo y a la transformación de la estructura productiva?
- ¿Cómo adecuara las currículas educativos a los requerimientos productivos del Uruguay del futuro?
- En un país que busca descentralizarse, ¿cómo entender el desarrollo productivo dese los territorios?
Participaron de la actividad la representante en Uruguay del Sistema de Naciones Unidas, Denise Cook; el integrante del Instituto de Economía, Henry Willebald; el director del Instituto Cuesta Duarte del PIT CNT, Milton Castellano; la representante de la Unión de Exportadores, Teresa Aishemberg; y José Miguel Benavente, del Banco Interamericano de Desarrollo.
Al final de su intervención, Vázquez subrayó: “De lo que decidamos hoy, ahora, dependerá el Uruguay del futuro”.