El Frente Amplio, acusó este viernes a Luis Lacalle Pou, de hacer declaraciones «injerencistas» sobre la situación de Cuba, al afirmar que se trata de una dictadura.
Así lo publicó en un comunicado en el que reafirma su «convicción y respaldo» al derecho de los pueblos a manifestarse pacíficamente, como también el de aquellos que quieren «defender sus conquistas».
«Desde el Frente Amplio rechazamos cualquier intento de injerencia internacional que promueva la intervención humanitaria forzosa en Cuba. (…) Condenamos las declaraciones injerencistas del Presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou y reafirmamos los lazos de amistad entre los pueblos de Uruguay y Cuba», resalta el texto.
En concreto, el mandatario uruguayo subrayó este lunes a la prensa que el pueblo cubano demuestra «un coraje digno de admirar» ante las protestas y describió a Cuba como «una dictadura que no respeta los derechos humanos».
En tanto, el FA también rechaza «todo tipo de bloqueo económico, comercial y financiero» contra la isla como también resalta la «solidaridad histórica e inquebrantable» con Cuba.
«Resulta insostenible que los mismos que reclaman intervenir militarmente en Cuba, se callan ante las atrocidades que Gobiernos de nuestro continente cometen frecuentemente contra las manifestaciones populares», acota.
Finalmente, el FA convoca a la comunidad internacional a «colaborar solidariamente con el pueblo cubano y eliminar el bloqueo en el pleno respeto del derecho internacional y las convenciones internacionales vigentes».
La declaración se da un día después de que la Cámara de Representantes del país aprobara, sin sus votos, una resolución de rechazó a «la escalada represiva y de incitación a la violencia» por parte del «régimen dictatorial» de Miguel Díaz-Canel, como también la oposición a «todo tipo de embargo económico, comercial y financiero» contra este país.
El domingo pasado, miles de cubanos salieron a las calles para protestar contra el Gobierno al grito de «¡libertad!», en una jornada inédita que se saldó con cientos de detenidos y enfrentamientos después de que el presidente Miguel Díaz-Canel conminara a sus partidarios a salir a enfrentar a los manifestantes.
Las protestas, las más fuertes que han ocurrido en Cuba desde el llamado «maleconazo» de agosto de 1994, se llevan a cabo con el país sumido en una grave crisis económica y sanitaria, afectado por la pandemia y una fuerte escasez de alimentos, medicinas y otros productos básicos, además de largos cortes de electricidad.
EFE
Comentarios