Referentes del colectivo afrodescendiente de Uruguay resaltaron la necesidad de empoderar a las mujeres de la comunidad, especialmente a las jóvenes, para acabar con la discriminación y la desigualdad que, denunciaron, existe hoy día.
El simposio virtual «Perspectivas y desafíos de la mujer afro. Desde Rocha al mundo», organizado de manera virtual por varias instituciones, entre ellas la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), ofreció este lunes un homenaje a ese colectivo en el marco del Día Internacional de la Mujer Afrolatina, Afrocaribeña y de la Diáspora, celebrado este domingo.
La senadora uruguaya Gloria Rodríguez, del gobernante Partido Nacional, reclamó que, ante las desigualdades, hay que «exigir el respeto de los derechos y la dignidad de la mujer afrodescendiente», además de «animar, preparar y apoyarlas» para que «se involucren y sean parte activa» de la sociedad.
«No tenemos las mismas oportunidades. Para eso estamos trabajando, no para que se nos otorguen privilegios, sino para que se nos concedan derechos», argumentó la legisladora, quien denunció que al «sexismo, violencia y desigualdad de oportunidades» que sufren las mujeres, las afrodescendientes le suman «la discriminación racial y exclusión».
Pese a que un 10 % de la población uruguaya se declara afrodescendiente, según dijo, apenas hay representatividad en la esfera pública, por lo que, en su opinión, la aspiración debe ser no ver «más titulares» como los que se refieren a su situación de primera senadora negra.
Por su parte, la jefa del Departamento de Equidad de la Intendencia de Rocha, Nelba Inceta Delmond, abundó en la idea de «generar espacios de encuentro e intercambio y visibilidad».
«Ser mujer y afrodescendiente significa ser sobreviviente, resiliente, defender nuestra complejidad y nuestras particularidades frente a diversos estereotipos que se nos impone, pero nos hermana y nos otorga cierto poder especial por una lucha continua por nuestro presente, por nuestro futuro, por nuestra felicidad», indicó.
Además, Angélica Ferreira, referente del colectivo afrodescendiente en el Chuy, ejemplificó situaciones de discriminación en la juventud y reclamó «inculcar a nuestras jóvenes que tengan aspiraciones».
Consideró un «desafío» educar a las nuevas generaciones para que alcancen «empoderamiento» mediante una posibilidad real de elegir profesión e, incluso, «cuándo o con quién casarse».
El simposio estuvo coorganizado por el Gobierno de Rocha, la Agencia Uruguaya de Cooperación Internacional (AUCI) y la AECID por medio de su Centro de Formación en Montevideo.
EFE