La huelga de los trabajadores del puerto de Montevideo, que comenzó este martes y se prevé dure hasta el jueves, es «un golpe al hígado» en la economía uruguaya ya que el país «no puede darse el lujo» de perder tantos días de exportaciones, dijo este miércoles el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado.
En declaraciones al noticiero local Telemundo, Delgado contó que ha estado en contacto con todas las partes y confía en que los trabajadores ratifiquen el preacuerdo al que llegaron este martes por la noche tras reunirse con el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, para levantar el conflicto.
«Uruguay no puede darse el lujo de perder día de exportaciones en el puerto. Sobre todo con el conflicto que hay vinculado a la falta de contenedores. Uruguay está en un momento de recupere económico con récord de exportaciones y esto es un golpe al hígado en la economía», subrayó.
En tanto, Mieres enfatizó a la prensa que esta es una medida que afecta mucho pero que tiene la expectativa de poder llegar «a un resultado positivo lo antes posible».
El paro de actividades de los trabajadores del puerto comenzó este martes con una manifestación ante la Torre Ejecutiva, sede del Gobierno uruguayo, para protestar por la falta de acuerdo para un convenio colectivo y por la ampliación de la concesión hasta 2081 a la empresa belga Katoen Natie.
Unos cien trabajadores marcharon a pie desde las instalaciones portuarias hasta la cercana Plaza Independencia, donde está ubicada la Torre Ejecutiva, entre gritos de «no se vende, el puerto no se vende», pancartas con leyendas como «basta de inestabilidad» o «queremos convenio digno» y humo de color.
En la convocatoria participaron trabajadores de Terminal Cuenca del Plata (TCP), concesionaria del puerto y cuyo 80 % pertenece a Katoen Natie y un 20 % al Estado uruguayo, a los que se sumaron los de Montecon, empresa competidora que también opera en las instalaciones portuarias.
En declaraciones a la prensa, Álvaro Reinaldo, representante de los trabajadores de TCP, reclamó la imposibilidad de «llegar a un acuerdo beneficioso» para ellos en la negociación del convenio colectivo.
Reinaldo reconoció que los trabajadores están «en conocimiento» de lo que puede afectar este paro a las operaciones portuarias y que, por ese motivo, se mantienen «abiertos al diálogo para escuchar todas las propuestas».
Katoen Natie anunció en marzo pasado una operación por valor de 455 millones de dólares para la expansión de la Terminal Especializada de Contenedores y recibió la extensión de la concesión (iniciada en 2001 y por 30 años) por 50 años más (hasta 2081).
Con esto, Katoen Natie dio por concluido el diferendo que tuvo con el Estado uruguayo «por infracciones» al Tratado de Promoción y Protección Recíproca de Inversiones entre Bélgica-Luxemburgo y Uruguay.
EFE