El presidente de Argentina, el peronista Alberto Fernández, celebró que las elecciones generales legislativas se desarrollen este domingo con «tranquilidad» y pidió a los argentinos que se «expresen».
«Venimos de emitir nuestro voto, un día de democracia, siempre lo celebro. Está todo transcurriendo con tranquilidad y lo que pedimos a los argentinos es que vayan y se expresen», dijo en esta jornada el jefe de Estado tras emitir su voto en la Universidad Católica Argentina, en el barrio porteño de Puerto Madero.
«Lo más importante es que hoy el pueblo se exprese y a la noche escucharemos qué ha dicho», indicó el mandatario acompañado de la primera dama, Fabiola Yáñez.
El presidente compareció ante la prensa de manera breve y evitó hacer declaraciones de tono político debido que todavía rige en el país la veda electoral hasta el cierre de los comicios.
Unos 34,3 millones de argentinos están llamados a elegir 127 diputados -de 257 que componen la Cámara Baja- por un mandato de cuatro años, mientras que en 8 provincias deberán también votar para elegir un total de 24 senadores -de los 72 que integran la Cámara Alta- para los próximos seis años.
Cuatro distritos serán clave por ser los más poblados del país: las provincias de Buenos Aires (37 % del padrón nacional), Córdoba (8,69 %), Santa Fe (8,06 %) y la capital argentina (7,43 %).
Por otra parte, el presidente señaló que para él este día es «una elección parlamentaria, nada más».
Sin embargo, los resultados de estos comicios definirán la correlación de fuerzas en el Congreso argentino.
En las primarias de septiembre, que sirvieron para elegir a los candidatos a diputados y senadores, la coalición opositora de Juntos por el Cambio obtuvo más del 40 % de los votos en todo el país, mientras que el oficialista Frente de Todos cosechó poco más del 30 %.
En caso de que se repitan estos resultados, el oficialismo perdería el quórum propio en el Senado y podría reducir su presencia en la Cámara de Diputados hasta prácticamente quedar en igualdad numérica o, incluso por debajo, del bloque opositor.
Estas elecciones se realizan bajo un protocolo sanitario por la covid-19 más flexible que en las primarias de septiembre pasado debido al avance en la vacunación y a la mejora de la situación epidemiológica.
Habrá solo una fila en cada mesa y los votantes no tendrán que esperar afuera de los centros habilitados como ocurrió en septiembre.
Argentina arrastra una crisis económica desde hace varios años que se ha visto agravada por la pandemia del coronavirus, que ha causado más de 116.000 muertos.
Además se suma un altísimo índice de inflación – 52,1 % interanual en octubre pasado-, una elevada tasa de pobreza (40,6 %), problemas de empleo y complejas negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para refinanciar deudas por 45.500 millones de dólares.
MACRI PIDE A LOS ARGENTINOS UN “CAMBIO DE ERA”
Por su parte, el expresidente Mauricio Macri (2015-2019) votó en una escuela del barrio capitalino de Palermo, donde también convocó a los argentinos a votar y de que sean los “protagonistas” de un “cambio de era”.
“Esperemos que todos los argentinos vayan a votar y sean los protagonistas de un cambio de era en la Argentina”, expresó el exmandatario conservador, una de las principales figuras de Juntos por el Cambio.
“Estamos entrando en una nueva era que va a ser guiada por la verdad y la sensatez y nos va a llevar a que cada argentino tenga trabajo”, vaticinó el expresidente delante de la prensa.
Consultado sobre cómo imagina los dos años que restan del mandato de Alberto Fernández, Macri contestó «difíciles» y señaló que «Juntos por el Cambio va ayudar a que la transición sea la más ordenada posible, rumbo a que se vuelva a poner el país en el rumbo concreto”.
EFE