“Lo fundamental que trajo la misión a Estados Unidos es que no hay ninguna intención de las autoridades sanitarias de ese país de prohibir el ingreso de carnes uruguayas”, enfatizó el presidente del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Federico Stanham, en referencia a la investigación que se realiza tras la aparición de trazas del garrapaticida etión en productos enviados a ese mercado por dos frigoríficos nacionales.
Dar la cara
“Lo importante fue dar la cara ante la auditoria sanitaria de Estados Unidos, en un mano a mano, de manera de exponer nuestros sistemas de trabajo, entender sus procedimientos, interpretar los resultados y trabajar conjuntamente en superar el episodio”, remarcó Stanham sobre la misión conformada por autoridades y técnicos del Ministerio de Ganadería y el Instituto Nacional de Carnes que estuvo en ese país del 16 al 20 de marzo.
“Tenemos confianza en los procedimientos que se realizan en Uruguay en inocuidad a nivel industrial y en los cuidados sobre producción animal. Sin embargo los sistemas de producción pueden tener debilidades o vulnerabilidades comunes en aquellos procesos basados en la biología por más desarrollados que sean. Para eso existen normas y procedimientos de monitoreo y control”, alegó.
El jerarca sintetizó que las autoridades de Estados Unidos solicitaron medidas preventivas y correctivas para evitar la aparición de etión. “Cuando los sistemas de inocuidad presentan una falla uno le tiene que decir a su cliente que hará para que no se repita o para reducir la posibilidad que ocurra”, complementó.
Sin sanciones
Stantham corroboró que los frigoríficos en cuestión no fueron sancionados sino una medida preventiva en primera instancia y como una demostración de que había “serias intenciones” de solucionar el inconveniente, por lo cual se decidió suspender los certificados sanitarios de manera de abrir un compas de espera para investigar.
El 19 de marzo, a partir de la detección de partidas de carne con trazas del fármaco etión por parte de la autoridad sanitaria de Estados Unidos, el ministerio dispuso restringir transitoriamente su uso y habilitar el movimiento para faena de animales con garrapata.
Sobre el tema, Aguerre había indicado que “no se estaba hablando de un sustancia de la cual haya evidencia científica de su toxicidad para el consumidor. Es una sustancia química registrada en Uruguay, que se utiliza para matar la garrapata y la mosca de los cuernos.
Agregó que “en 35 años de estar registrado el Etión, nunca aparecieron residuos, ni acá, ni en los embarques a China, Europa o EE.UU”. “También es una sustancia registrada en Australia, principal exportador a EE.UU, y donde no ha habido detecciones de residuos”.