El presidente, Luis Lacalle Pou, reconoció este viernes que su país no ve completamente «todos sus intereses satisfechos» en el Mercosur, al tomar la palabra en la cumbre semestral del bloque, que se coordina desde Brasilia.
Lacalle Pou dijo que una «parte buena de este semestre» en que Brasil ejerció la presidencia rotativa del bloque ha sido «el sinceramiento» y lamentó que «no haya habido entendimientos totales» respecto a algunos puntos, en clara alusión a la rebaja del 10 % del Arancel Externo Común.
«Tenemos vocación de pertenecer al Mercosur», aunque «quizás con un futuro próximo un poco distinto», dijo Lacalle Pou, cuyo Gobierno condicionó la rebaja de los aranceles a que se altere la cláusula que impide a los Estados miembros negociar acuerdos comerciales con otros países o bloques en forma individual.
Lacalle Pou dijo compartir las ansias de «prosperidad y libertad» que existen en el Mercosur, pero apuntó que algunos desacuerdos son generadores de «ciertas tensiones» en los «intereses nacionales».
Según el mandatario uruguayo, se debe llegar «necesariamente» a un «punto intermedio» en esas tensiones «para que todos se sientan satisfechos», con lo que pareció aludir a la decisión de su Gobierno de avanzar individualmente hacia un acuerdo comercial con China, pese a que las actuales normas del bloque lo impiden.
«Uruguay ha sido claro en cuál es el camino a seguir», subrayó Lacalle Pou, quien agregó que insistirá en su postura «en los tiempos que vienen» y garantizó que su país seguirá «apostando de forma muy optimista en ese futuro».
En la cumbre, que se celebra en forma virtual, participan además los gobernantes de Argentina, Alberto Fernández; de Uruguay, Luis Lacalle Pou, y de Paraguay, Mario Abdo Benítez, quien al final de la reunión recibirá de Bolsonaro la presidencia rotativa del bloque, que su país ejercerá durante el primer semestre de 2022.