La Justicia dictó este viernes 90 días de prisión preventiva para el jugador del Peñarol Nicolás Schiappacasse por porte ilícito de arma de fuego, además de otros cargos por los que fue formalizado.
La fiscal encargada del caso, Ana Dean, dijo a la prensa que en principio se habían solicitado 120 días de prisión preventiva para el jugador, que será el tiempo en el que se desarrolle la investigación, aunque la Justicia determinó un plazo de 90 días para posteriormente ir a un juicio.
«El imputado Schiappacasse fue formalizado por reiterado delito de tráfico de arma de fuego y municiones, uno de ellos en concurso formal de receptación, todos en reiteración real y un delito de porte de arma de fuego en lugares públicos», detalló y añadió que el proceso de investigación «recién comienza».
Schiappacasse fue detenido el pasado miércoles con un arma de fuego 9 milímetros cuando acudía a presenciar un partido de pretemporada entre su equipo y el Nacional.
En ese sentido, el abogado del jugador, Rafael García, detalló en una conferencia de prensa que el arma había sido denunciada como robada desde hace dos años además de que el detenido no cuenta con licencia para el porte de armamento.
Este hecho se da en medio de una discusión en el país suramericano en la que el foco está centrado en la violencia dentro del deporte y las posibles medidas para su erradicación.
De hecho, los dos partidos programados en la pretemporada entre los clásicos rivales, el Peñarol y el Nacional, se organizan sin el paraguas de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), que decidió no participar al no darse todas las condiciones de seguridad precisas.
En los días previos, varios hechos violentos presuntamente vinculados a los grupos ultras de ambos clubes generaron este debate en la sociedad.
En cuanto a su relación con el club, el presidente del Peñarol, Ignacio Ruglio, declaró a los medios en el ámbito del partido jugado anoche que «este tipo de cosas no pueden pasar».
«Si las cosas son como se describen, nosotros sabemos que el jugador a Peñarol no vuelve y no vamos a dudar un segundo, porque además es momento de bajar ese tipo de mensaje», apuntó.
EFE