Cientos de ciudadanos ucranianos se manifestaron este viernes frente a la sede de la embajada rusa en Buenos Aires para exigir el cese inmediato de hostilidades por parte de Moscú, cuyo ejército avanza por las inmediaciones de Kiev tras la incursión militar iniciada este jueves.
Bajo las consignas de «no a la guerra» y «estamos con Ucrania», un nutrido grupo de manifestantes se congregó ante las instalaciones diplomáticas de Rusia en la capital argentina, en una convocatoria que también contó con la presencia de algunos ciudadanos rusos contrarios a las políticas del presidente Vladímir Putin.
En declaraciones a Efe, el presidente de la Asociación Ucrania de Cultura Prosvita de Argentina, Jorge Danylyszyn, defendió que Ucrania es «un país soberano» que «en ningún momento se planteó atacar a Rusia».
«Nosotros lo que queremos es que las tropas de Putin se retiren de Ucrania. Rusia se comprometió en el tratado de 1994 (conocido como «memorando de Budapest») a preservar la integridad territorial de Ucrania. Eso es una cosa que no está cumpliendo», aseveró Danylyszyn en una conversación telefónica.
En ese sentido, Danylyszyn describe como «angustiantes» las imágenes que llegan desde Kiev y otras ciudades de Ucrania, donde muchos argentinos descendientes de ucranianos mantienen vínculos familiares y afectivos.
«Todos tenemos familiares allá y lo paradójico de todo esto es que nuestros familiares comienzan a dejar de hablar con nosotros, porque tienen miedo de volver a la época soviética, en la que los habitantes de la Unión Soviética eran castigados por tener parientes en la diáspora», afirmó.
En total, hubo cuatro olas migratorias de ciudadanos ucranianos hacia Argentina: la primera fue en 1897, la segunda y tercera tras la primera y segunda guerra mundial, respectivamente, y una cuarta y última en los años 90.
Según estimaciones de la Asociación Ucrania de Cultura Prosvita, actualmente hay unos 300.000 descendientes de ucranianos en Argentina, la mayoría de ellos radicados en las provincias del noreste (Misiones, Chaco, Corrientes y Santa Fe) y en la ciudad de Buenos Aires y sus alrededores.
REACCIÓN DE ARGENTINA
El Gobierno de Argentina pidió este jueves a Rusia «cesar las acciones militares» en Ucrania y reiteró la necesidad de respetar los principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, «sin ambigüedades», según manifestó en un comunicado la Cancillería del país suramericano.
La posición argentina frente a este conflicto ratifica lo expresado el miércoles por parte del Representante Permanente Alterno del país ante la ONU, Fabián Oddone, quien señaló en la 58 sesión plenaria la «preocupación» por el desarrollo de la situación generada en Ucrania.
Una situación que se da apenas unas semanas después de que el presidente Fernández se reuniera en Moscú con Putin en el marco de la gira que realizó por Rusia, China y Barbados, y que levantó críticas en la oposición argentina, entre otros motivos, por el contexto en que se dio, ya en medio de las crecientes tensiones en Ucrania.
El encargado de Negocios en la Embajada de Ucrania en Argentina, Sergiy Nebrat, máximo responsable de esa sede diplomática, reclamó este viernes que el Gobierno argentino dé «señales más claras» en apoyo a su país, incluyendo la imposición de «sanciones» económicas contra Rusia.
«Quería pedir una señal clara de la parte argentina para Rusia», señaló el representante ucraniano, en declaraciones a la prensa a las puertas de la embajada, en Buenos Aires, en las que se mostró disconforme con la postura que está adoptando Argentina.
EFE