Unas 200 personas se concentraron este miércoles frente a la puerta de la embajada de Rusia en Montevideo para mostrar su apoyo a Ucrania y solicitar la salida del ejército ruso de ese país.
Con banderas, carteles y velas en mano, quienes asistieron hasta el lugar permanecieron cerca de una hora en la que lanzaron cánticos y gritaron frases como «Asesino» o «Fuera Putin», al mismo tiempo que colocaron flores amarillas en la entrada de la sede diplomática.
Por otra parte, durante esta jornada los legisladores uruguayos firmaron una declaración en la que los senadores rubricaron «su más enérgico rechazo a la amenaza y eso de la fuerza como medio de resolución de controversias».
En el documento exhortaron también a que las partes «retomen las negociaciones mediante canales diplomáticos neutrales y hagan los esfuerzos necesarios para poner fin a las hostilidades».
Sobre el mediodía, también se colocaron banderas blancas con la paloma de la paz en el exterior del Palacio Legislativo «como señal de la expresión del más alto deseo de la paz en el mundo», según indicó en su cuenta de Twitter la vicepresidenta de Uruguay, Beatriz Argimón.
El Ejército ruso avanzó hoy con intensos ataques en el sur de Ucrania, donde tomó el control de Jersón, y donde prácticamente bloquea ya Mariúpol, así como en el este, donde asegura haberse apoderado en buena medida de la costa del mar de Azov. Todo ello un día antes de nuevas negociaciones con Kiev.
La invasión de Ucrania ha tenido sin embargo su coste para Rusia, no solo por las sanciones occidentales sin precedentes, sino también por las bajas que sufre en sus filas.
Por primera vez en siete días de ofensiva militar admitió la muerte de 498 soldados rusos en la guerra, además de 1.597 militares heridos, según el portavoz del Ministerio de Defensa, Igor Konashénkov.
La viceministra ucraniana de Defensa, Hanna Malyar, dijo hoy que, según datos preliminares de Kiev, hasta el momento han muerto 5.840 soldados rusos.
Según Rusia, las bajas entre las fuerzas ucranianas ascienden a 2.870 fallecidos y los heridos 3.700.
El asalto a Jersón, una ciudad de casi 300.000 habitantes y situada al sur de Ucrania, a orillas del mar Negro y junto al río Dniéper, comenzó el día 1 y hoy acabaron de tomar el control.
EFE