Un carro tirado por un caballo chocó contra un auto que se encontraba estacionado en calle Zorrilla y 25 de Mayo, una esquina muy transitada.
No hubo heridos, el dueño del carro huyó del lugar, dejando el auto con roturas en parabrisa y luces traseras del mismo. Increíblemente la carrocería del automóvil no sufrió abolladuras o rayaduras.
Quien conducía la unidad se encontraba estacionado esperando a una persona que había concurrido a la mutualista. «Vi como se venía contra el auto, fue todo un segundo, por suerte no había gente cruzando,» dijo quien estaba al mando de la unidad, mientras esperaba la presencia policial.