El senador nacionalista Sergio Botana presentó su proyecto de ley que plantea modificar la vigente ley de Descentralización, uno de cuyos aspectos centrales pasa por que toda población de más de 1.000 habitantes deba, obligatoriamente, pasar a ser considerada un municipio.
La iniciativa fue recibida por sus colegas como una «gran oportunidad» para debatir e incluir otros aspectos referidos al tercer nivel de gobierno, publicó ayer El País.
El tema es debatido en la Comisión Especial de Asuntos Departamentales y Municipales. En el Frente Amplio, la senadora Sandra Lazo ratificó en la última sesión de ese ámbito el apoyo de su formación al espíritu del proyecto, en cuanto a la creación de municipios y el «fortalecimiento» de la descentralización. También el colorado Germán Coutinho, para el que el proyecto representa un «buen disparador» para replantear algunos aspectos que se pueden mejorar y corregir, además de incorporar otros elementos que no se habían incluido en leyes previas. Por ejemplo, en lo que refiere al pago por voto al alcalde, algo que sí existe en el resto de los ámbitos electorales.
El senador colorado planteó además la posibilidad de buscar la «rentabilidad» de cargos como los concejales, que hasta hoy son honorarios. «Capaz que hay mucha diferencia en cuanto a que un alcalde cobre el salario que a veces cobra, contra sus compañeros que no cobran nada», señaló.
Botana señaló que su proyecto pretende clarificar y dar una definición clara de las competencias de los municipios, y así evitar «contiendas» con el intendente o, directamente, casos en que las comunas «no le dan» al municipio los elementos para pueda ejercerlas.
Con respecto a los recursos, se busca asegurar un «mínimo» de fondos departamentales y abrir la posibilidad de que los municipios cuenten con otro tipo de fondos que se vayan legislando en el futuro «si encontramos nuevas fuentes». También se plantea que el alcalde sea el ordenador de gastos sin tener que contar con el aval del concejo.
El proyecto plantea la posibilidad de que el municipio pueda contar con funcionarios propios, pagados con sus propios recursos, que nunca podrán adquirir la calidad de funcionarios departamentales, salvo que la intendencia los absorba. Según Botana, el objetivo es que las alcaldías puedan contar con «alguna mano de obra propia» cuando sea necesaria, sin que esto signifique realizar nombramientos que luego terminan afectando las finanzas globales del departamento.
Por otra parte, el senador nacionalista apunta a que las juntas departamentales tengan sobre las alcaldías los mismos controles que ejercen sobre las intendencias.
Vía: El País