El actor español Imanol Arias recibió este martes en Montevideo la medalla Delmira Agustini, otorgada por Uruguay a figuras destacadas de la cultura y las artes, «agradecido» y con ganas expresas de volver a visitar y hacer más teatro en el país.
Así lo aseguró Arias en un discurso tras hacerse con la distinción que desde 2013 el Ministerio de Educación y Cultura de Uruguay entrega como homenaje a quienes hayan contribuido «de manera excepcional» a la cultura y las artes en el Palacio Taranco de la capital.
El actor de 67 años, conocido por interpretar a Antonio Alcántara en la serie «Cuéntame cómo pasó», así como por sus roles en filmes como «El Lute: camina o revienta» o «Salvajes», comenzó su agradecimiento con un énfasis en «lo que significa estar agradecido» pues, dijo, «a veces las cosas le devuelven mucho más de lo que corresponde».
A lo que recordó sus vínculos con Latinoamérica, donde filmó su primera película de dos años de producción en la década de 1980, Arias hizo una mención especial de su vínculo con el director teatral uruguayo Atahualpa del Cioppo (1904-1993), cuya llegada a España exiliado, dijo, lo «pilló» en sus años de formación actoral.
El español hizo alusión además al director y actor uruguayo Walter Vidarte, a quien dijo recordar diciendo que los maestros uruguayos exiliados debían «una compensación» a los españoles por el aporte que hizo a su teatro la actriz y directora Margarita Xirgu (1888-1969).
Por otro lado, el actor, que interpretará el 24 y 25 de mayo en el Auditorio Nacional del país en Montevideo la obra ‘Muerte de un viajante’, basada en la conocida novela de Arthur Miller, expresó que para él «sería un honor» volver a la capital uruguaya «en el banquillo y a las órdenes de lo que haga falta».
«Desde hace tiempo yo sé que hay intenciones de que yo venga a Montevideo y ahora ya ha sucedido pero hay otra pieza (…), ‘El coronel no tiene quien le escriba’, que yo tengo con esta misma compañía. Me comprometo a gestionar para venir a Montevideo a hacerla 10 días en un teatro razonable», apuntó.
Si bien alegó que una constante en su vínculo con la ciudad es que le «faltan días» para «patear y ronronear», Arias concluyó su discurso celebrando a Uruguay.
«Que viva el Uruguay, que tienen ustedes una capacidad de querer muy grande (…) Todo mi cariño, mi respeto y mi profunda gratitud, que el universo y toda su energía siga bendiciendo a esta tierra porque nos va a enseñar mucho de cómo vivir en el futuro en relación con la Tierra también», redondeó.
EFE