“Alterar la rotación de uso y manejo de suelo es posible mientras no modifique la susceptibilidad que ese suelo tiene a la erosión, pues es el problema ambiental más importante en agricultura”, dijo el ministro de Ganadería, Tabaré Aguerre. Destacó que, en virtud del aumento del precio de la soja, los productores la conciben como el producto para cosechar en el verano. “No hay inconvenientes si no afecta la erosión”, dijo.
Aguerre reconoció que la suba del precio de la soja hace atractivo el cambio de rubro por parte de los productores, debido a los precios. “Eso deja a la soja, por lejos, como la mejor alternativa agrícola para el verano que viene. Probablemente mucha gente esté haciendo números para tratar de cambiar la rotación presentada”, explicó al respecto.
“La mayoría de los productores tienen en claro que en aquellas situaciones donde el suelo viene de una agricultura continua y sin rotación de cultivos los rendimientos son menores. En eso radica la buena aceptación que tiene la política”, aludió Aguerre en declaraciones a la prensa tras la presentación de la convocatoria dirigida a productores lecheros de la cuenca del río Santa Lucía.
En otro orden, el titular de Ganadería subrayó que disminuir los problemas adyacentes al aporte de fósforos y nutrientes al agua del río Santa Lucía “es uno de los objetivos para desarrollar” por su cartera.
“No hay que pensar que los problemas que están hoy son productos del crecimiento agrícola o de la lechería en los últimos diez años. Lo que se está manifestando son problemas que vienen de mucho tiempo y los estamos atacando con la obligatoriedad de presentar planes de uso y manejo de suelos”, aseveró.
Uruguay es el único país que posee una política de control de suelos en función de su capacidad de uso, para preservar los daños provocados por la erosión, tema en el cual la cuenca sufría dicho inconveniente desde el año 1981, según señaló.
En ese sentido, la titular de la Dirección General de Recursos Naturales, Mariana Hill, mencionó a la erosión como el problema ambiental más importante de la producción agropecuaria, porque, además de los efectos que recaen sobre el mismo suelo que erosiona, también afecta a los sitios del paisaje en los que se depositan los sedimentos y a ecosistemas acuáticos.
“Controlando la erosión se está controlando una de las fuentes más importantes de contaminación de agua, además de conservar el recurso”, señaló.
En ese sentido, destacó que un plan de uso es una secuencia de cultivos y pasturas de rotación planificada para cada unidad de uso y manejo.
El objetivo es que el uso del suelo esté relacionado con su capacidad de uso. El requisito para la presentación de los planes es que la erosión promedio anual estimada sea menor o igual a la tolerancia indicada para ese suelo. La garantía de este proceso será asegurada por los 588 agrónomos acreditados para presentar planes ante el Ministerio de Ganadería.
“Tienen que llevar a la chacra o campo buenas prácticas con responsabilidad ambiental”, sugirió. Los padrones con planes presentados en agricultura sostenible en Uruguay son 13.160 hectáreas, en 1.4 millones de hectáreas dedicadas a esa producción, con un 98 % de cumplimiento.
El total de superficie de cultivos bajo planes de uso de suelo para la cuenca del río Santa Lucía alcanza a 97.750 hectáreas, de las cuales las gramíneas totalizan 12.500 hectáreas, pasturas 6.514 hectáreas, soja 78.037 hectáreas, girasol 58 y 638 hectáreas aún están sin definir su producción.
Hill informó que el ministerio comenzó a implementar otras acciones como una nueva cartografía, adecuación del laboratorio en la caracterización de suelos, desarrollo de sistemas de orientación y control de laboratorios privados, y apoyo a la investigación.
vía Presidencia de la República