El Gobierno defiende en el Senado la millonaria compra de buques a astillero español

Imagen de archivo del ministro de Defensa de Uruguay, Javier García. EFE/Raúl Martínez

Montevideo, 8 ago (EFE).- El Gobierno defendió este martes la compra de dos buques de patrulla oceánica al astillero español Cardama por un precio de unos 92 millones de dólares (83 millones de euros al cambio de hoy) tras conocerse que, luego de concretarse la compra, China enviara una carta de reclamo a la Comisión de Defensa del Senado.

Según señala la prensa local, el ministro de Defensa del país suramericano, Javier García, insistió en la defensa de la compra a la empresa española Cardama por encima de la china CSTC y la de países bajos Damen ya que, a su juicio, «primaron los intereses nacionales».

El comandante en jefe de la Armada, Jorge Wilson, señaló que Cardama fue el “astillero mejor evaluado” por los almirantes de la fuerza.

“Se seleccionaron, en el orden que se dijo, a Cardama, a Kership y a Cotecmar como las tres mejores propuestas en cuanto a las capacidades complementarias, pero todos cumplían con los requisitos que la Armada había pactado”, dijo Wilson según recoge el diario El Observador.

Wilson destacó que la oferta de Cardama era la que costaba menos (unos 11 millones de dólares) y la que ofreció la entrega «más rápida» de los dos buques.

Por su parte, el ministro García exhibió una nota enviada por el Gobierno español en junio.

“De acuerdo con la información que obra en nuestro poder, la empresa mencionada (Cardama) es un astillero español civil fiable y conocido, que con anterioridad ya ha trabajado para el Ministerio de Defensa de España y el Ministerio del Interior”, expresó.

El Gobierno de Uruguay anunció en julio en conferencia de prensa la compra de los dos buques a la empresa gallega Cardama, algo que para García, permitirá a la Armada «retomar su misión esencial» de «custodia de la soberanía nacional en el mar».

Además, de acuerdo con el ministro, ayudará a cumplir con el cuidado de los recursos naturales y a «evitar y reprimir actividades ilegales».

Elegida entre un total de ocho ofertas, la del astillero Cardama Shipyard, una empresa con sede en Vigo (España) que, según detalla la compañía en su sitio web, fue fundada en el año 1916 y en sus inicios se dedicó a la construcción y reparación de buques de madera, García la destacó como la opción más práctica y menos costosa.

De acuerdo con el ministro uruguayo, fue la oferta que garantizó que los barcos, que tienen una dimensión de 86,7 metros de eslora por 12,2 de manga y un calado de 3,6 metros, así como un cañón principal de 30 milímetros, un hangar y una plataforma para helicóptero, lleguen «más rápidamente».

Según consignó el diario El País, el primero llegará a inicios de 2025 y el segundo al final de ese año.

EFE

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