Desde la mañana del martes, Uruguay enfrenta un sistema tormentoso intenso, impulsado por una zona de bajas presiones en los niveles medios y altos de la atmósfera. Esta inestabilidad atmosférica, exacerbada por el ingreso de aire cálido, ha desencadenado la formación de nubes de tormenta de gran envergadura tanto en Argentina como en Uruguay, provocando fenómenos meteorológicos severos.
Una supe célula de tormenta, registrada visualmente cerca del mediodía del martes en el departamento uruguayo de Artigas, fronterizo con el estado brasileño de Rio Grande do Sul, destaca por su estructura única de nube de plataforma. Este tipo de nube, habitualmente vinculada a líneas de turbonada, se caracteriza por su formación cuando el aire cálido asciende sobre una capa de aire más frío, condensándose rápidamente y generando su apariencia distintiva. Las nubes en plataforma, conocidas en inglés como «Shelf Clouds», son precursoras de vientos fuertes y potencialmente destructivos que preceden a la tormenta.
Hasta la tarde del mismo día, el Instituto Uruguayo de Meteorología ha reportado ráfagas de viento que alcanzan los 138 km/h en Mercedes, 97 km/h en Tacuarembó y 91 km/h en la ciudad de Rivera.
Estos fuertes vientos han causado considerables daños en Mercedes, incluyendo la caída de árboles y desprendimientos de techos. El fenómeno responsable de estas intensas ráfagas ha sido identificado como una micro ráfaga, una corriente descendente de viento que puede generar ráfagas comparables a las de un tornado.
El pronóstico meteorológico advierte que el riesgo de mal tiempo persistirá en Uruguay durante las próximas horas, especialmente en los departamentos del norte y en Rocha, al norte del Río Negro, así como en zonas próximas a la frontera con Brasil. Se espera que la inestabilidad atmosférica disminuya gradualmente a lo largo del miércoles, mejorando las condiciones climáticas en varias ciudades del país.
- Contenidos tomados de una nota de MetSul escrita por Luiz F. Nachtigall