El Gobierno, a través de un decreto, implementó el artículo 284 de la ley n° 19.924, que obliga a la erradicación de montes frutales abandonados por constituir un peligro fitosanitario. Esta medida busca prevenir la dispersión de plagas y enfermedades que afectan a cultivos aledaños, anunciaron fuentes oficiales.
El director general de la Granja del Ministerio de Ganadería, Nicolás Chiesa, en declaraciones al portal de la Presidencia, enfatizó la importancia de mantener los montes frutales en condiciones óptimas. «Uruguay no puede permitirse mantener montes frutales en estado de abandono», señaló. En este sentido, el ministerio procederá a notificar a los responsables de estos terrenos para su adecuada erradicación o mantenimiento, con el objetivo de evitar la propagación de plagas como el gusano de la manzana y el durazno, la grafolita y la carpocapsa.
Chiesa recordó que en 2020 y 2023 se invitó a los productores con montes en mal estado a registrarse para recibir apoyo económico destinado a mejorar estas áreas. Definió como abandonados a aquellos montes que no hayan recibido tratamiento contra plagas en el último año, sin importar el tipo de producción. Además, se considerarán en esta categoría aquellos terrenos sin plantas o con ramas secas y aquellos que durante dos temporadas consecutivas no hayan tenido un manejo adecuado de los árboles frutales.
El decreto también afecta a los terrenos sin registros documentales o digitales de actividades fitosanitarias. Los propietarios, arrendatarios o cualquier figura de tenencia de tierras con montes frutales deberán notificar su situación a la Dirección General de la Granja y facilitar el acceso al predio a los funcionarios del ministerio. Además, se habilita a cualquier persona a denunciar la existencia de montes frutales en desuso ante la autoridad competente.
«De no permitirse el acceso al predio, se procederá judicialmente, y en caso de no cumplir con la erradicación, se aplicarán sanciones por parte del Ministerio de Ganadería», concluyó Chiesa.